Revolución Liberal y Conflictos Políticos en la España del Siglo XIX

La Gloriosa Revolución de 1868 y el Sexenio Democrático

Causas de la Revolución de 1868

La Revolución de 1868, conocida como “La Gloriosa”, fue el resultado de una confluencia de crisis que afectaron al régimen isabelino:

  • Crisis financiera: Escasa rentabilidad de las inversiones ferroviarias.
  • Crisis industrial: Aumento del precio de la materia prima en el sector textil y caída de la demanda.
  • Crisis de subsistencias: Sucesión de malas cosechas.

Desarrollo de la Revolución

El movimiento revolucionario se inició en septiembre de 1868 con la sublevación de la escuadra en Cádiz, liderada por el brigadier Topete. Junto a Prim y Serrano, firmó el Manifiesto “España con honra”. Este pronunciamiento fue seguido por un movimiento insurreccional que formó juntas revolucionarias.

La Junta de Madrid nombró un Gobierno provisional encabezado por Prim, con el general Serrano como regente del reino.

El Gobierno Provisional y la Constitución de 1869

El Gobierno Provisional se propuso:

  • Democratizar el régimen liberal mediante el sufragio universal masculino y la ampliación de las libertades.
  • Liberalizar la economía e impulsar el librecambio. Se redujeron las tarifas arancelarias y se creó la peseta. Se eliminó el impuesto de consumos.

Las elecciones de enero de 1869, mediante sufragio universal masculino, dieron lugar a unas Cortes Constituyentes que elaboraron la Constitución de 1869, que establecía:

  • Un amplio catálogo de derechos y libertades.
  • La monarquía democrática, limitando los poderes de la Corona y reforzando la soberanía nacional a través del poder legislativo. El poder ejecutivo quedaba en manos del gobierno, responsable ante las Cortes, y se garantizaba la independencia del poder judicial.

La Monarquía de Amadeo de Saboya (1871-1873)

Tras la promulgación de la Constitución, las Cortes iniciaron la búsqueda de un nuevo rey. El elegido fue Amadeo de Saboya, hijo de Víctor Manuel II de Italia. Fue proclamado rey en enero de 1871, poco después del asesinato de Prim, su principal valedor.

Durante su reinado, se produjo una gran inestabilidad política debido a:

  • La fragmentación de la coalición monárquico-democrática en el Partido Constitucionalista (Sagasta) y el Partido Radical (Ruiz Zorrilla).
  • El estallido de dos guerras: la Tercera Guerra Carlista (1872-1876) y el conflicto colonial en Cuba.
  • La oposición de los republicanos y el auge del movimiento obrero.
  • La oposición de las élites tradicionales, que apoyaban el regreso de los Borbones en la figura de Alfonso XII, lideradas por Antonio Cánovas del Castillo.

Amadeo de Saboya renunció al trono el 10 de febrero de 1873.

La Primera República Española (1873-1874)

Proclamación y Primeros Gobiernos

Tras la abdicación de Amadeo, las Cortes proclamaron la Primera República. El primer gobierno estuvo compuesto por el Partido Radical de Ruiz Zorrilla y los federales, con Estanislao Figueras como presidente.

Tras la ruptura de la coalición, Figueras formó un gobierno republicano y convocó elecciones constituyentes, que ganaron los republicanos.

Las Distintas Concepciones Republicanas

Dentro del republicanismo existían dos corrientes principales:

  • Republicanos unitarios (Ruiz Zorrilla y Emilio Castelar): Defendían una república unitaria.
  • Republicanos federales (Pi y Margall): Defendían una república federal con ampliación de derechos democráticos.

El Intento de República Democrática y Federal

En junio de 1873, se formó un nuevo gobierno presidido por Pi y Margall. Se propuso la Constitución Republicana Federal de 1873, que planteaba una concepción federal del Estado, dividiendo España en 17 Estados federados, incluyendo Cuba y Puerto Rico, con amplia autonomía.

Los Problemas de la República

  • Intensificación de los conflictos: la insurrección carlista y la cubana.
  • Revolución Cantonal: La impaciencia del republicanismo intransigente, las sociedades obreras, las milicias urbanas y los campesinos andaluces, junto con la represión de la huelga general de Alcoy, provocaron una insurrección popular que se extendió por el levante y el sur peninsular. Se proclamaron cantones federales con gobiernos autónomos.
  • Aislamiento internacional: Solo Estados Unidos y Suiza reconocieron la República española.

Pi y Margall dimitió y fue sustituido por Nicolás Salmerón, quien inició un viraje conservador. Salmerón dimitió por su desacuerdo con la aplicación de tribunales militares contra los cantonalistas.

Emilio Castelar, republicano unitario, le sucedió y gobernó por decreto. Su caída precipitó el golpe de Estado del general Pavía el 3 de enero de 1874.

La Liquidación de la República

El poder pasó a una coalición de unionistas y progresistas, encabezada por el general Serrano, quien impuso un régimen autoritario. El 29 de diciembre de 1874, el general Martínez Campos proclamó rey a Alfonso XII, hijo de Isabel II, mediante un pronunciamiento en Sagunto.

El Carlismo y la Primera Guerra Carlista (1833-1839)

Desarrollo del Conflicto

Carlos María Isidro, hermano de Fernando VII, reivindicó sus derechos dinásticos en el Manifiesto de Abrantes, dando inicio a la Primera Guerra Carlista. Las etapas de la guerra fueron:

  • 1833-1835: Estabilización y avance del ejército carlista, hasta la muerte del general Zumalacárregui.
  • 1835-1837: Expediciones militares carlistas para romper su aislamiento. Fracaso del intento de tomar Bilbao.
  • 1837-1839: Ofensiva isabelina bajo el mando de Espartero. Firma del Convenio de Vergara (1839) entre Maroto y Espartero, que preveía el mantenimiento de los fueros en las provincias vascas y Navarra y la integración de la oficialidad carlista en el ejército real.

Consecuencias de la Guerra

  • Demográficas: Entre 150.000 y 200.000 muertos.
  • Políticas: Consolidación de la división del liberalismo en moderados y progresistas.
  • Económicas: Aumento de la deuda, condicionamiento de la desamortización y dificultades para el desarrollo industrial.

El Proceso de la Revolución Liberal (1833-1843)

El Régimen del Estatuto Real

Ante la insurrección carlista, la regente María Cristina, bajo el gobierno de Cea Bermúdez, buscó un acuerdo dinástico y concedió una amnistía a los liberales. Se promulgó el Estatuto Real de 1834, una carta otorgada que establecía unas Cortes estamentales con carácter consultivo y subordinado al monarca. El sufragio era muy restringido (0,15% de la población).

El Estatuto Real consolidó la división entre liberales moderados (partidarios de una transición reformista) y progresistas (partidarios de recuperar la obra de las Cortes de Cádiz).

El Acceso de los Progresistas al Poder

Las revueltas ciudadanas de 1835 llevaron a la formación de juntas revolucionarias de signo progresista. La regente nombró un nuevo gobierno encabezado por el liberal progresista Juan Álvarez Mendizábal, quien impulsó:

  • La derrota del carlismo.
  • La transformación del Estado en un sentido liberal.
  • Una reforma agraria con la desamortización de tierras eclesiásticas y la supresión de congregaciones religiosas.

María Cristina destituyó a Mendizábal y entregó el gobierno a los moderados.

La Vuelta al Poder de los Moderados (1837-1840)

Tras la aprobación de la Constitución de 1837, los moderados ganaron las elecciones. Se caracterizaron por:

  • Suspender la Constitución y gobernar de forma autoritaria.
  • Centralización política con la Ley de Ayuntamientos (1840), que otorgaba a la Corona el nombramiento de alcaldes.

Los progresistas, sintiéndose excluidos, iniciaron revueltas. María Cristina apoyó a los moderados, pero el general Espartero, defensor del programa progresista, se impuso. María Cristina se exilió en 1840.

La Regencia de Espartero (1840-1843)

Espartero disolvió las juntas, convocó elecciones (mayoría progresista) y derogó la Ley de Ayuntamientos. Optó por la regencia única.

Durante su regencia:

  • Se impulsaron las libertades y el asociacionismo obrero.
  • Se negoció un arancel librecambista que abría el mercado español a los tejidos ingleses. Esto provocó un levantamiento en Barcelona, que fue duramente reprimido por Espartero.

En 1841, se produjo un movimiento militar contra Espartero liderado por O’Donnell. En 1843, la oposición progresista y los generales moderados llevaron al exilio de Espartero. Los moderados tomaron el poder.