Transformación de la Península Ibérica: De Invasiones Bárbaras a la Herencia Romana

Las Invasiones de los Pueblos Bárbaros: Desde el siglo III, el Imperio entró en una crisis política y económica. Los sucesivos pretendientes al trono imperial iniciaron una larga cadena de guerras civiles que afectó al sistema en el que se basaba la prosperidad y la seguridad del mundo romano. Las ciudades eran saqueadas y se hicieron peligrosas, y la gente más acomodada se trasladó a las grandes villas rurales. Esto afectó a la vida social, económica, política y cultural, y hubo un declive hasta la desaparición del estado romano en el occidente de Europa. El colapso de las ciudades provocó una larga decadencia, porque rompió las estructuras comerciales y las redes de comunicaciones. A estas guerras internas hay que sumar a los bárbaros que habían sido ignorados por los romanos. Las tierras vasconas se hallaban en la Galia hacia Hispania, y sufrieron las incursiones de todos los invasores. Pompaelo quedó convertida en población de aspecto rural, y conservó su prestigio ya que en ella residía el obispo.

Las villas rurales fueron asaltadas, pero su recuperación es más fácil que la de una ciudad y aseguraba al menos la supervivencia. En el siglo V, varios pueblos bárbaros cruzaron el Pirineo y arrasaron estas tierras hasta llegar a la Bética. Se les llamaba bárbaros, ya que era un nombre griego y se utilizaba para designar a los extranjeros, que adquirió su significado negativo. El poder romano no podía controlar el territorio por los grupos de forajidos que atacaban las ciudades y villas. Además, los visigodos entraron en la península y pusieron orden en nombre del emperador que les pedía ayuda. Pero el Imperio de Occidente desapareció y los visigodos se convirtieron en los señores de Hispania. La denominación romana había dejado una gran huella. Pamplona ha mantenido su condición de cabeza de la religión, el cristianismo, que servía para unir a los habitantes frente al enemigo. Junto al latín, quedó un universo cultural, el latino, que todavía se conserva.

El Mundo Rural

Las residencias más importantes contaban con todo tipo de instalaciones para la agricultura, viviendas para los siervos, cómodas mansiones para el dueño y la familia… Algunos tenían producción suficiente para sobrevivir sin ayuda exterior, por lo que contaban con una garantía en épocas de crisis. Estas villas han dejado importantes huellas en la mitad meridional de Navarra. Las vías de comunicación permitían la comercialización de los excedentes de producción en las regiones vecinas, y los productos de moda se construían en Asia o África. Las relaciones económicas llegaban a Galia. Pompaelo se convirtió en el mercado receptor y distribuidor de esas mercancías.

El Mundo Urbano

La Roma se basaba en el desarrollo de ciudades y en el control del entorno. Se convertían en centros comerciales y de abastecimiento agrario, en los gestores del poder administrativo y político, y estaban en comunicación a través de calzadas. Esto generaba un desarrollo de servicios a disposición de sus habitantes, que incluían desde mercados hasta alcantarillados. Pompaelo era la primera ciudad vascona. Hubo excavaciones que sacaron a la luz restos de mercados. El perímetro de esta ciudad coincide con lo que es Navarrería.

Los datos arqueológicos más increíbles proceden de Andelo, donde se han encontrado vestigios de mansiones. También destaca Cascante, que llegó a contar con un taller de acuñación de monedas. Todo estaba unido por calzadas que atravesaban el imperio de un lado a otro, permitían además enlazar Pamplona con Zaragoza y con la capital imperial.

Los Romanos en el Valle Medio del Ebro

En el siglo III, las legiones romanas iniciaron la ocupación de Hispania, que va a ser vital para el dominio del Mediterráneo Occidental, para cereales y el aprovechamiento de minerales. La península luchó contra los cartagineses y acabó por transformarse en una provincia más. Con el tiempo, los soldados vascones se metieron en el ejército practicando luchas por el poder. Pomepyo fundó la ciudad Pompaelo para refugiarse del invierno en el siglo 75 a.C., este buscaba seguridad. Hubo un fracaso popular frente a Julio César, y los vascones de las tierras meridionales ya habían iniciado su integración paulatina en la órbita romana.

Diversidad Cultural de los Vascones

El complicado proceso de influencias provocó que los vascones dejaran de ser un grupo homogéneo. Las llegadas de otros pueblos habían influenciado en las zonas del sur, más llanas y fértiles para la agricultura, que en las del norte, dedicadas a la ganadería. En consecuencia, las comarcas meridionales mantenían unos modos de vida más avanzados y establecieron relaciones con otras comarcas del Valle del Ebro. La mezcla de los habitantes antiguos con los inmigrantes fue continua, lo que había hecho desaparecer los rasgos de las razas y habían creado un ambiente cultural con aportes de orígenes diversos. Por lo contrario, la economía de subsistencia se basaba en la cría del ganado, y esto provocó un modelo social más tradicional, un urbanismo menos desarrollado, con pequeñas poblaciones y un contacto menor con otras culturas.

Tampoco había un modo político institucional, y cada población tenía su propia autonomía. En las tierras más cercanas al Ebro, el aislamiento en pueblos más grandes exigía una ordenación más consolidada y establecen una cierta estructura de poder político.

Arquitectura

En Navarra se han encontrado plantas de casas y templos de Andelo. Los patios decorados y estancias recuerdan a las grandes ciudades y villas de la época. Las obras de ingeniería han dado resultado, como la presa y el depósito de agua de esta. El monumento más curioso es la torre Urkulu, y pudo ser un punto de vigilancia sobre la vía que atravesaba el Pirineo, o sino como símbolo del poder romano en lo alto de la cordillera.