La Unificación Alemana (1815-1871)
La Unificación de Alemania fue un proceso de integración y posterior unificación de diferentes Estados en una sola entidad alemana. Sus antecedentes se sitúan en los años inmediatamente posteriores al final de las guerras napoleónicas y la reunión del Congreso de Viena (1815), aunque realmente se extendió en las décadas centrales del siglo XIX y finalizó en 1871 con la proclamación del “Segundo Imperio Alemán” o Segundo Reich (el Kaisereich).
Protagonistas de la Unificación
El proceso tuvo como protagonistas principales a:
- El rey Guillermo I de Prusia, convertido en 1871 en el emperador (káiser) Guillermo I.
- Su primer ministro, el canciller Otto von Bismarck (conocido como el “Canciller de Hierro”).
- El jefe de Estado Mayor del ejército prusiano, general Moltke, autor de algunas de las batallas más decisivas de la Unificación.
La Confederación Germánica y la Rivalidad Austro-Prusiana
Tras la derrota de Napoleón en 1815, un conjunto de 39 estados independientes de Centroeuropa, unidos por su cultura “alemana”, formaron la Confederación Germánica. La Confederación era un intento de gestionar conjuntamente los problemas económicos y sociales (incluyendo las amenazas revolucionarias) que afectaron a Europa central después del fin de Napoleón.
Sin embargo, dos estados sobresalieron:
- El reino de Prusia: Potencia militar en ascenso, partidaria de la unificación en torno a una “Pequeña Alemania” bajo su liderazgo.
- El Imperio de Austria-Hungría (imperio austrohúngaro): Entidad plurinacional, partidaria de la unificación en torno a una “Gran Alemania” bajo su liderazgo.
Austria y Prusia se enfrentaron en cuestiones básicas de la Confederación. No lograron una política conjunta en las revoluciones de 1830 y 1848. Estas desavenencias se trasladaron al ámbito económico. En 1834, diversos estados “alemanes” formaron el Zollverein (unión aduanera), un proyecto de unión económica basado en el librecambismo, impulsado por Prusia y marginando a Austria.
El Zollverein fue crucial en el proceso de Unificación porque:
- Contribuyó a marginar a Austria.
- Sus fronteras sirvieron de base para las fronteras posteriores de la Alemania unificada.
Estaban en juego los intereses de las élites industriales y la hegemonía económica en el centro de Europa: ¿Austria o Prusia sería el motor del desarrollo industrial? La rivalidad creció hasta la guerra austro-prusiana de 1866, donde Prusia salió victoriosa.
Las Guerras de Unificación
El camino hacia la unificación alemana estuvo marcado por tres conflictos bélicos clave:
1. Guerra contra Dinamarca (1864)
Prusia y Austria entraron en guerra contra Dinamarca para arrebatarle los ducados de Schleswig y Holstein, territorios de mayoría alemana. Tras el conflicto, quedaron bajo el dominio mancomunado de Austria y Prusia.
2. Guerra Austro-Prusiana (1866)
Prusia se enfrentó a Austria, derrotándola tras conseguir la neutralidad de Napoleón III de Francia y aliarse con Víctor Manuel II, rey del Piamonte. El ejército prusiano se impuso, destacando la batalla de Sadowa (3 de julio de 1866). La Paz de Praga estableció:
- Prusia incorporó Schleswig, Holstein, Hannover y otras regiones.
- Austria renunció a la “Gran Alemania” y aceptó la disolución de la Confederación Germánica.
- Austria cedió Venecia a Italia.
Poco después, los estados alemanes se unificaron en la Confederación de Alemania del Norte, reconociendo a Guillermo I como soberano.
3. Guerra Franco-Prusiana (1870-1871)
Prusia, bajo Guillermo I y Bismarck, buscó el enfrentamiento con Francia para:
- Arrebatarle Alsacia y Lorena.
- Dilucidar la potencia hegemónica en Europa continental.
El pretexto fue la candidatura de Leopoldo de Hohenzollern, primo de Guillermo I, al trono español, vacante tras el destronamiento de Isabel II en 1868. Francia se opuso, temiendo quedar atrapada entre dos naciones de la misma dinastía.
Napoleón III envió a su embajador a Bad Ems, donde veraneaba Guillermo I, para que Leopoldo renunciara. Guillermo I rechazó las presiones. Bismarck manipuló el telegrama de Guillermo I (“Telegrama de Ems“) para movilizar a la opinión pública prusiana contra Francia. Ambas naciones se movilizaron, y el 19 de julio de 1870, Francia declaró la guerra a Prusia.
Los prusianos, bajo el mando de Moltke, derrotaron a los franceses en varias batallas: Froeschwilier (6 de agosto), Rezonville (16 de agosto) y Gravelotte-Saint Privat (18 de agosto).
La Batalla de Sedán
El encuentro definitivo fue en Sedán, el 2 de septiembre de 1870. Los ejércitos franceses fueron rodeados y derrotados. Murieron o fueron heridos 17,000 franceses (frente a 7,000 prusianos). Napoleón III fue hecho prisionero. En París estalló la revolución de la Comuna, duramente reprimida. Se proclamó la Tercera República, que duraría hasta 1940.
Francia se rindió. El Tratado de Fráncfort (mayo de 1871) estipuló:
- Cesión de Alsacia y Lorena a Prusia, culminando la unificación alemana.
- Francia pagaría una indemnización de guerra de 5,000 millones de francos.
Guillermo I fue proclamado káiser (emperador) de Alemania en la Galería de los Espejos del palacio de Versalles el 18 de enero de 1871. Nacía el Segundo Reich Alemán. Se consolidaba el enfrentamiento entre Francia y Alemania, un problema clave en la política internacional europea hasta décadas recientes.