Historia de la Península Ibérica: Desde la Prehistoria hasta el Reino Visigodo

El Proceso de Hominización y el Paleolítico en la Península Ibérica

El descubrimiento en el yacimiento de Atapuerca (Burgos) de los restos de una nueva especie de homínido, el Homo antecessor, ha retrasado la aparición del ser humano en Europa hasta el 1.200.000 BP. La industria lítica asociada a las culturas del Paleolítico Inferior en la Península (1.200.000-100.000 BP) se caracteriza por la talla de bifaces sobre núcleos de sílex. Yacimientos destacados del periodo son Atapuerca, Nerja o Lisboa.

Paleolítico Medio

Durante el Paleolítico Medio (100.000-35.000 BP), encontramos el complejo cultural musteriense, asociado al Homo neanderthalensis, cuyo útil más característico es la raedera, realizada sobre lascas con una técnica más compleja. Yacimientos destacados de este periodo son el de Gibraltar y el de Cueva Morín (Cantabria).

Paleolítico Superior

En el Paleolítico Superior (35.000-8.000 a.C.) hallamos culturas materiales asociadas al Homo sapiens (Cromagnon). Fabrican sus útiles con técnicas novedosas (microlitos sobre láminas) y nuevos materiales (huesos). Aparecen también las primeras manifestaciones de arte rupestre. Yacimientos del periodo son los de Altamira y El Castillo (Cantabria).

Pueblos Prerromanos y Colonizaciones Históricas

La protohistoria peninsular (800-218 a.C.) es rica en manifestaciones culturales. Tartessos (Ora Maritima) era una cultura extendida por el sur peninsular, de gran riqueza ganadera y minera, que comerciaba con fenicios y griegos y se organizaba políticamente como monarquía (Argantonio). Decayó en el siglo VI a.C.

Cultura Íbera

La cultura ibera (ss. V-III a.C.) se extendió por el litoral mediterráneo, abarcando a numerosos pueblos con diferente organización política, pero similitudes económicas y de hábitat. Mantuvieron estrecho contacto con los colonizadores griegos y cartagineses.

Cultura Celta y Celtibérica

En el interior de la Meseta se desarrolló la cultura celtíbera, donde las influencias de los colonizadores se atenuaban. Eran pueblos de economía agraria pobre, organización política gentilicia y hábitat castreño (Numancia). Compartían estos rasgos con los pueblos del área celta (N y O de la península), dónde el primitivismo era aún más acusado.

Colonización Fenicia

Los colonizadores más antiguos en la península fueron los fenicios (ss. VIII-VI a.C.), que acudieron en busca de metales. Fundaron numerosas ciudades en el sur, como Gades, Sexi o Abdera, y parece que introdujeron la metalurgia del hierro y el torno de alfarero en la península.

Colonización Griega

La colonización griega es posterior (ss. VI-III a.C.) y se extendió por la costa mediterránea, desde la desembocadura del Segura al cabo de Rosas. La colonia más antigua es Emporion (Gerona), fundada por colonos marselleses. Comerciaron con los pueblos iberos y dejaron una profunda influencia en esta cultura (arte, lengua, signos culturales).

Colonización Cartaginesa

Los cartagineses se establecieron en la península desde el siglo IV a.C., sustituyendo a los fenicios. El carácter comercial de la primera colonización cambió a partir del siglo III a.C., cuando los cartagineses hicieron de la península una importante base para su enfrentamiento con Roma.

Conquista y Romanización de Hispania

Roma conquistó la Península Ibérica en un largo proceso que se extiende desde el 218 al 19 a.C. Tres etapas enmarcan este periodo:

  • La II Guerra Púnica (218-202 a.C.)
  • Las Guerras Celtíberas (155-133 a.C.) y Lusitanas (150-139 a.C.)
  • Las Guerras Cántabras (29-19 a.C.)

A lo largo de este tiempo, Roma fue incorporando a su dominio a los distintos pueblos prerromanos, alternando la presión militar con el pacto político.

El Legado Romano

Las tradiciones culturales de los distintos pueblos peninsulares se fueron adaptando progresivamente a las pautas culturales romanas, en un proceso conocido como romanización. El proceso se extendió a lo largo de todo el periodo de dominación romana y el grado de asimilación de la cultura romana fue diferente entre los pueblos hispanos.

Lengua y Derecho

La más evidente señal de romanización fue la generalización del latín. Si bien durante época republicana las lenguas iberas eran predominantes, en el Imperio el latín fue desplazando a las lenguas indígenas, sobre todo entre las elites. Sin embargo, no desapareció un fuerte sustrato lingüístico prerromano. El derecho romano se impuso de forma determinante en la Península, modelando las instituciones políticas, y su influjo se deja sentir hasta la actualidad.

Literatura

La literatura latina halla también en la Península a algunos de sus autores más destacados como Séneca, Marcial o Quintiliano.

Las Invasiones Bárbaras y el Reino Visigodo

Desde comienzos del siglo V, el dominio romano sobre la Península Ibérica se verá sustituido por la presencia de distintos pueblos germánicos. Primero los suevos, vándalos y alanos (407) y luego los visigodos (418) dejarán sentir su influencia sobre las comunidades hispano-romanas. Será a partir del reinado de Leovigildo (568-585) cuando el dominio visigodo se extienda de manera efectiva a la mayor parte del territorio peninsular.

Instituciones Visigodas

Monarquía

La monarquía visigoda era electiva, según quedó regulado en el IV Concilio de Toledo (633). Sin embargo, son numerosos los casos de usurpaciones del poder real, así como de sucesión directa de padres a hijos.

Concilios

Junto con la Monarquía, los Concilios suponían la otra gran institución visigoda. Las reuniones de obispos no sólo trataban de asuntos religiosos, sino que se imbricaban profundamente en las relaciones monarquía-nobleza. Concilios fundamentales fueron el III de Toledo (589; conversión al catolicismo) y el IV de Toledo (633; regulación acceso al trono).

Aula Regia y Oficio Palatino

El monarca se veía acompañado por el Aula Regia, reunión de aristócratas godos que debían asesorar al rey. De ella surgía el Oficio Palatino, cuyos miembros ostentaban los cargos principales de la administración central.

Administración Territorial

En los distintos territorios la administración goda se hacía presente mediante duces, comes civitates y obispos, con funciones políticas locales.

Cultura Visigoda

En el plano cultural en el periodo visigodo, destacan las obras de Isidoro de Sevilla (Etimologías) y Braulio de Zaragoza, así como la creación de una rica arquitectura (hoy casi desaparecida) y una importante labor artesanal (orfebrería).