Introducción
La poesía lírica se caracteriza por su musicalidad y la expresión de sentimientos personales variados. Su contenido constante era el mito y estaba destinada a ser recitada ante un público acompañado de algún instrumento musical.
Poesía Lírica en Roma
La lírica latina comienza en Roma mucho más tarde que la épica o el teatro. Comienza a finales del siglo II a.C.
Cayo Valerio Catulo (84-54 a.C.)
Nació en Verona. Tuvo una vida breve, pero intensa. El único autor del que se nos han conservado todos sus poemas. Destacaba entre los poetas jóvenes de su época. La pasión desencantada y la muerte de su hermano le hacen llegar a una revelación íntima que llena de luz su alma, indecisa entre el odio y el amor. Se le recuerda como poeta amoroso.
Grandes elegíacos que le sucedieron: Tibulo, Propercio y Ovidio.
Quinto Horacio Flaco (65-8 a.C.)
Nació en Venusia (Apulia). Recibió educación en Roma y más tarde en Grecia, (entusiasmándose con la filosofía epicúrea). Cuando volvió a Roma empezó a escribir sus Épodos y Sátiras. Tenía amistad con Virgilio (se lo presentó a Mecenas y fueron amigos durante toda su vida). No se casó nunca. Se dedicó a su actividad literaria, permitiéndose rechazar el cargo de secretario particular del “princeps”, que le había ofrecido Augusto.
Obras
Épodos
Están a media distancia entre la poesía satírica y lírica. Reúne 17 poemas cortos (de tono violento y agresivo sobre temas muy diversos). Hay un poema de tema bucólico, el conocidísimo Beatus Ille, en el que canta la vida del campo frente a las complicaciones de la vida urbana.
Odas (CARMINA) (30 y el 20 a.C.)
Composiciones líricas agrupadas en cuatro libros (intenta crear una poesía lírica que rivalice con la griega). Naturalmente utiliza temas y metros líricos griegos. En los primeros libros, Horacio apoya las intenciones morales y religiosas de Augusto, incluyendo una temática muy variada:
- Temas político-nacionales, centrados en el valor educativo de la guerra y en la predicación de la vida serena y la aurea mediocritas, como medio de freno para las ambiciones y ansia de novedades provocadas por la guerra civil.
- Temas religiosos, donde Horacio usa a los dioses como un mero artificio literario
- Temas de ética y moral, donde se incluyen alguno de tipo erótico y otros de tipo profano (la alegría de los banquetes, la tranquilidad de la vida del campo, amores propios y ajenos…), pero donde fundamentalmente se deja ver la influencia de la filosofía epicúrea que Horacio profesaba, en clara contradicción con su carácter típicamente romano: se ha de vivir el presente, disfrutando de la vida (“carpe diem”), pero de una manera sensata, con calma y tranquilidad, evitando el ansia de riqueza y las esperanzas infundadas, que fueron, según él, las causantes de la crisis romana. En el fondo Horacio entiende el deber por encima de los placeres del alma.
→ Toda la lírica de Horacio es una meditación en torno a la muerte: ésta es el hilo conductor de su mundo.
→ Horacio manifiesta sus gustos literarios en la “Epistula ad Pisones”, denominado también Ars Poética.
→ Características:
- Sentido del equilibrio
- Sentido de la perfección
Ovidio (43 a.C.-17 d.C.)
La terrible atracción que Ovidio sentía hacia la poesía queda patente en toda su obra. Espíritu libre. Personaje económicamente independiente. Nunca quiso sentirse vinculado a nadie. El tremendo golpe de infortunio en su vida del año 8 d.C., el destierro a Tomis, su gran tragedia, significó paradójicamente su consagración como poeta elegíaco. De los tres grandes autores romanos que tuvieron que asumir el exilio (Cicerón, Séneca y Ovidio) es Ovidio el que con más dureza y persistencia fue afectado. Una vez en Tomis hizo todo lo posible por conseguir el perdón y regresar a Roma, pero todo fue inútil, incluso tras la muerte de Augusto. Sólo su amor a la poesía le libró de la desesperación total; murió en el destierro.
Tema que se centra: Eros es el dios a quien este poeta rinde culto, por supuesto de una manera muy especial.
Resumen del conjunto de su producción
- Poemas eróticos de juventud:
- Elegíacos: Amores y Heroidas
- Didácticos: Ars Amatoria, Remedia amoris y De medicamine faciei femineae
- Obras maestras:
- Fasti (incompleta): relación de fiestas, costumbres y leyendas del calendario romano. Estaba dedicada a Augusto y escrita en seis libros en dísticos elegíacos.
- Metamorfosis: es el gran poema épico, plagado de narraciones mitológicas y escrito en hexámetros.
- Poemas desde el exilio, fundamentalmente elegíacos:
- Poemas didácticos: Halieutica y Phaenomena
- Elegías: Tristia, Epistulae ex Ponto
Aspectos a destacar en cada una de sus obras
- Amores: se trata de un conjunto de elegías de tema amoroso, dedicadas muchas de ellas a una tal Corina.
- Heroidas: son las cartas apasionadas o epístolas poéticas que Ovidio atribuye a heroínas míticas dirigidas a sus maridos o amantes: Penélope a Ulises, Dido a Eneas, etc.
- Tristia: se trata de doce libros con casi cien poemas, que estuvieron terminados alrededor del año 12 d.C. Aquí no nombra a los destinatarios de estas cartas poéticas personales, según él mismo afirma, para no comprometerlos. A pesar de que muchos poemas empalman con la gran tradición elegíaca (por ejemplo, la estremecedora despedida de Roma), la mayoría fatigan por su tono quejumbroso y deprimen por la autohumillación en su desdicha.
- Epistulae ex Ponto: son cuatro libros de cartas dirigidas a su mujer y a influyentes amigos, pidiendo insistentemente que intercedan por él para que le sea levantado el exilio