Cinco Horas con Mario: Un Retrato Íntimo de la España de Posguerra
La Noche del Velatorio: Un Preludio al Monólogo Interior
La novela nos sumerge en la **España de posguerra**, mostrándonos la **mentalidad de la época** y la **difícil situación** en la que se encontraba la sociedad. La protagonista, **Carmen Sotillo**, acaba de perder a su marido, **Mario**. Sin embargo, la narrativa sugiere que Mario, en cierto modo, sigue presente. La historia comienza con el velatorio, donde familiares y amigos exageran sus sentimientos. Destaca **Encarna**, la cuñada de Mario, cuyo escandaloso comportamiento lleva a sospechar que fue su amante, aunque la **falta de comunicación** entre los esposos impide a Carmen confirmarlo.
El Monólogo de Carmen: Un Viaje al Pasado
Tras el velatorio, el relato se centra en el **eje de la novela**: Carmen, frente al cadáver de Mario, **rememora su pasado juntos**. Inicia un **desordenado monólogo**, cargado de **emotividad**, **lamentos** y **reproches**. Carmen recupera recuerdos, narra vivencias y se da cuenta de los **errores cometidos** y de la **frustración** que le ha supuesto su matrimonio. Destaca el **espíritu contradictorio** de Mario, quien nunca la tuvo en cuenta, según Carmen. Ella anhelaba más detalles por parte de su marido, como la compra de un coche, algo que para ella simbolizaba la felicidad.
Carmen relata momentos de su vida y, paralelamente, lee párrafos subrayados por Mario, exigiendo su atención, incluso después de su muerte. La historia no sigue un orden cronológico; Carmen habla sin orden, mezclando temas. Algunos hechos se repiten a lo largo del libro, como la **noche de bodas**, que Carmen vivió como una profunda **humillación** porque Mario no quiso tener relaciones. Otro tema recurrente es la sospecha de que **Encarna** estaba enamorada de Mario, especialmente después de la muerte de su marido, Elviro. Carmen cree que Mario le fue infiel con ella. También se queja de la **desconfianza** de su marido y de que nunca le comprara un coche, algo que, según ella, hasta las porteras tenían. Menciona un encuentro casual con Paco, un antiguo conocido, quien la lleva al centro en su coche, despertando su admiración.
La Familia y el Arrepentimiento
Carmen valora profundamente a su **familia** y a sus padres, a diferencia de Mario, quien no derramó una lágrima cuando su madre falleció. A lo largo de la historia, Carmen se da cuenta del tipo de vida que ha llevado y se arrepiente. Menciona que sus hijos no la oirán hablar mal de Mario. La noche termina y comienza un nuevo día. Mario, uno de los hijos de Carmen, va a buscarla. El capítulo final narra el instante previo al funeral, cuando los empleados llegan a recoger el cadáver. Es la **última despedida** de Carmen y Mario.
Personajes Principales: Carmen Sotillo
Retrato de una Mujer Frustrada
**Carmen Sotillo** es la esposa de Mario y la narradora de la historia. Físicamente, el libro menciona su **belleza** y cómo tener tantos hijos le estropeó el cuerpo. Psicológicamente, se profundiza más en su **frustración**. Carmen siente que Mario no solo no comprendió sus ideas, sino tampoco sus necesidades. Le molestaba que no la tuviera en cuenta. La **falta de comunicación** entre los esposos es evidente, e incluso busca ser escuchada frente al cuerpo inerte de Mario.
Valores y Creencias
Carmen tiene un sistema de valores basado en el **éxito** y el **estatus social**, y rechaza los valores y creencias de Mario. Se opone a las reformas sociales que él apoyaba. **Guardar las apariencias** es fundamental para ella. La **noche de bodas** y la negativa de Mario a comprarle un coche son dos de los eventos que más la marcaron. Le gusta dar limosna directamente a los pobres para ver su gratitud y asegurarse de que solo la reciben quienes la merecen.
Una Personalidad Compleja
Carmen es una persona **hipócrita**, **egocéntrica**, con tintes **fascistas** y **pagada de sí misma**. Quiere imponer sus valores a sus hijos y se queja de tener que llevar ella sola todo lo referente a la casa y al cuidado de los hijos, sin ayuda de Mario. También le reprocha que nunca la tratase como una mujer y que le fuera infiel. Todo esto es analizado por Carmen, quien posteriormente se lo reprocha a su marido ya fallecido.