El Modernismo (1880-1914)
El modernismo (1880-1914) es un movimiento literario cultural que surge en Latinoamérica encabezado por José Martí y Rubén Darío. En sus orígenes, se presenta como una réplica a la tradición española. Los jóvenes modernistas buscan afirmar sus raíces americanas y rebelarse contra todo aquello que suene a español. Es un movimiento sintético que se inspira en movimientos estéticos del siglo XIX, con raíces en las tradiciones romántica, parnasiana y simbolista de la literatura francesa, así como en la literatura estadounidense, italiana e inglesa. Estas fuentes literarias impulsaron la renovación del léxico, el ritmo y la métrica, y la creación de una nueva estética. La máxima aspiración del modernismo es crear un mundo de belleza absoluta y la perfección formal de la obra. El movimiento supone el rechazo de la realidad cotidiana e inmediata, con el artista creando un mundo imaginario o refugiándose en su interior.
Rasgos y Características
Del romanticismo, adoptan el descontento ante la vida, el culto a la muerte, la soledad, la melancolía, la imaginación y la fantasía. De la inspiración parnasiana, proviene la búsqueda de la perfección formal, la evocación de la antigüedad cultural con mitos, el exotismo y la búsqueda del placer estético. De los simbolistas, toman la idea de la sugestión, los efectos musicales y la concepción del poeta como medio para conocer el mundo. La belleza modernista se consigue a través de las imágenes visuales, el color, la música y los efectos sonoros. Entre los versos preferidos se encuentran el dodecasílabo y el alejandrino, aunque también se utiliza el verso libre y la estrofa clásica. Se observa una gran riqueza léxica y la búsqueda del prestigio del vocablo.
El Modernismo en España
A finales del siglo XIX, el panorama poético español estaba dominado por el lenguaje prosaico de Ramón de Campoamor y Núñez de Arce. Antes de la llegada de Rubén Darío, Salvador Rueda y Francisco Villaespesa se consideran los primeros modernistas en España. Escritores como J.R. Jiménez, los hermanos Machado y Valle-Inclán también se adscriben al movimiento, especialmente en sus inicios.
Modernismo frente a la Generación del 98
La división entre estéticos (modernistas) y pensadores (Generación del 98) se atribuye a Pedro Salinas, aunque más tarde él mismo enfatizó la unidad. Dámaso Alonso distingue entre la técnica modernista y la actitud del 98, considerándolos conceptos que se pueden mezclar o combinar en un mismo poeta o poema. La Generación del 98 se entiende como una actitud, un grupo de escritores con inclinación por los temas regeneracionistas. Resulta complejo aislar esta corriente del movimiento general de las literaturas hispánicas, debido a la fina y densa red que une a todos los creadores de finales de siglo. Se atribuyó a Azorín la invención de una división artificial entre modernistas y noventayochistas, pero en realidad, él se limitó a atribuir a los modernistas españoles el nombre de Generación del 98 o generación de fin de siglo.
La Poesía de Antonio Machado
Antonio Machado estudió en la Institución Libre de Enseñanza y estuvo en París en dos ocasiones (1889 y 1902), donde trabajó como traductor y entró en contacto con las nuevas corrientes poéticas francesas: parnasianismo y simbolismo. A su vuelta a Madrid, publicó su primer libro poético, Soledades (1903), de clara influencia modernista. Este libro tuvo una segunda edición en 1907, con el título Soledades, galerías y otros poemas. Machado obtuvo la cátedra de francés en el instituto de Soria y se casó con Leonor Izquierdo, quien murió joven, a los 17 años, sumiendo al poeta en una profunda depresión. Trasladado a Baeza (Jaén), terminó la carrera de Filosofía y Letras, y luego se trasladó a Segovia. En 1927, fue elegido miembro de la RAE y conoció a Guiomar. La Guerra Civil los separó, iniciando una peregrinación por varias ciudades españolas (Valencia, Barcelona) y finalmente a Francia, donde murió poco después de llegar.
Obras
- Soledades, galerías y otros poemas: Temática variada, emociones íntimas (dolor, recuerdos, melancolía, tiempo, infancia como paraíso perdido).
- Campos de Castilla: Recopilación de poesías divididas en cuatro grupos:
- Soria: El paisaje soriano como vehículo para descubrir el alma de España.
- Baeza: Recuerdo nostálgico del paisaje soriano y crítica social a la España inmovilista.
- Proverbios y cantares: Meditaciones sobre los enigmas del hombre y del mundo.
- Elogios: Dedicados a figuras como Francisco Giner de los Ríos, Ortega y Gasset, Rubén Darío y Miguel de Unamuno.
- Imágenes: El camino y la fuente como símbolos. La palabra como símbolo y denotación.
Métrica
Machado utiliza versos dodecasílabos y alejandrinos en los poemas de influencia modernista, pero prefiere el octosílabo. Emplea la silva arromanzada, de rima asonante, por la libertad que le ofrece la combinación de heptasílabos y endecasílabos. Elige el verso no por sus efectos sonoros, sino como vehículo para expresar su afectividad.
La Poesía de Juan Ramón Jiménez
Juan Ramón Jiménez, modernista y novecentista, se divide en tres etapas: sensitiva, intelectual y última o verdadera.
Etapa Sensitiva (1898-1915)
Influencia de Bécquer, el simbolismo y el modernismo. Predominan las descripciones del paisaje como reflejo del alma del poeta: paisajes otoñales, jardines al atardecer, sentimientos vagos, tristeza, melancolía, música, color, recuerdos y ensueños amorosos. Poesía emotiva y sentimental. Obras: Rimas (1902), Arias tristes (1903), Jardines lejanos (1904), La soledad sonora (1911) y Estío (1916).
Etapa Intelectual (1916-1936)
Marcada por su viaje a América en 1916. El mar como símbolo de la vida, la soledad, el gozo. Búsqueda de la trascendencia a través de la belleza y la depuración poética. Obras: Diario de un poeta recién casado (1916), Primera antología poética (1917), Eternidades (1918), Piedra y cielo (1919), Poesía (1917-1923), Belleza y La estación total (1923-1936).
Etapa Última o Verdadera (1937-1968)
Búsqueda de la belleza y la perfección. Ansia de trascendencia e identificación con Dios. Obras: Animal de fondo, Tercera antología poética, En el otro costado y Dios deseado y deseante.
Literatura Vanguardista y Generación del 27
Las Vanguardias son los movimientos artísticos de principios del siglo XX que se rebelan contra la concepción del arte basada en la realidad. Mantienen el gusto por lo excepcional y lo extraño heredado del simbolismo. Sus programas se difunden por manifiestos y revistas literarias. Características comunes: antirrealismo, autonomía del arte, irracionalismo, afán de originalidad, rechazo a la tradición literaria, experimentación estética y uso del verso libre.
Vanguardias Europeas
- Futurismo: Civilización mecánica, urbana y nuevas tecnologías. Renovación del lenguaje poético. (Marinetti)
- Cubismo: Descomposición de la realidad en formas geométricas. Caligramas de Guillaume Apollinaire.
- Surrealismo: Búsqueda de la realidad mediante la exploración del inconsciente y los sueños. (André Bretón)
- Ultraísmo: Supresión de elementos narrativos. Importancia de la percepción y la metáfora. (Rafael Cansinos Asséns, Guillermo de la Torre, Jorge Luís Borges)
- Creacionismo: Defensa del simbolismo. (Vicente Huidobro, Gerardo Diego, Juan Larrea)
- Expresionismo: Imágenes intensas y violentas. Temas de angustia y opresión.
- Dadaísmo: Destrucción de las normas, incoherencia, intuición e inconsciente. (Tristán Tzara)
Las Vanguardias en España
A principios del siglo XX, se produce una apertura cultural hacia Europa. Ramón Gómez de la Serna publica la traducción del Manifiesto futurista en 1909. En 1918, llega a España Vicente Huidobro y en 1919 aparece el primer manifiesto ultraísta. En 1925, se publica la traducción del Manifiesto Surrealista de André Bretón. El surrealismo, impulsado por Juan Larrea, es el movimiento vanguardista de mayor influencia en España.
Novecentismo
Movimiento artístico-cultural impulsado por intelectuales como Eugenio d’Ors, Ortega y Gasset, Manuel Azaña, Gregorio Marañón, Pérez de Ayala, Salvador de Madariaga, Claudio Sánchez y Américo Castro. También conocidos como la Generación de 1914. Características: sólida formación intelectual, rigor intelectual, claridad expositiva, rechazo de lo sentimental, preferencia por lo clásico, defensa del arte puro, aristocratismo intelectual, estilo cuidado y depurado, preocupación por la estructura de las obras e incorporación a la vida oficial.
Generación del 27
En los años 20, surge una excepcional promoción de poetas: Pedro Salinas, Jorge Guillén, Gerardo Diego, Federico García Lorca, Rafael Alberti, Vicente Aleixandre, Luis Cernuda, Emilio Prados, Manuel Altolaguirre, Dámaso Alonso, Maruja Mallo. El nombre se debe a Dámaso Alonso y la fecha al homenaje a Góngora en su tercer centenario.
Tradición y Renovación
La Generación del 27 no imitó la iconoclasia de las vanguardias anteriores. Integró elementos valiosos del pasado con las exigencias de la poesía moderna. Heredó formas y motivos de la lírica popular (romancero, cancionero tradicional) y culta (San Juan de la Cruz, Fray Luis de León, Garcilaso). Influencia de Góngora, Bécquer y J.R. Jiménez. Motivos temáticos: el río como fugacidad de la vida, la rosa como belleza eterna, la vida como un sueño. En cuanto a la adaptación de formas vanguardistas, se emplearon el verso libre, el versículo, el verso blanco, el caligrama y el collage.
Temas de la Generación del 27
Temas principales: amor, muerte, destino y universo. Dos etapas: la primera, dominada por la poesía pura y la admiración por Juan Ramón Jiménez; la segunda, marcada por la influencia del surrealismo. La Guerra Civil disgregó al grupo.
Pedro Salinas
Para Salinas, la poesía es un modo de acceder a la esencia de las cosas. Temas: el amor y el conocimiento. Estilo: contención en la expresión de los sentimientos, selección léxica, contrastes, oposiciones, paralelismos, repeticiones. Etapas: influencia vanguardista y gongorina (Presagios, Seguro azar, Fábula y signo); trilogía amorosa (La voz a ti debida, Razón de amor, Largo lamento).
La voz a ti debida
Homenaje a la amada. Tono de júbilo. Motivos: alegría, lágrimas, recuerdos, sombras. Diálogo entre “yo” y “tú”. Estructura temática en tres partes: gozo, angustia en el gozo, dolor y sombras. Recursos estilísticos: paralelismos, paradojas, antítesis. Predomina el verso heptasílabo.
Jorge Guillén
Poesía fruto de un riguroso proceso de selección. Obras: Cántico (canto a la creación, poesía pura), Clamor y Homenaje.
Gerardo Diego
Combina rasgos vanguardistas con la tradición literaria. Obras: Romancero de la novia, Nocturnos de Chopin, Imagen, Manual de espumas, Versos humanos, Fábula de Equis y Zeda. Dos etapas: poesía relativa o de la expresión (influencia de Bécquer y J.R. Jiménez); poesía absoluta o de creación (influencia vanguardista).
Federico García Lorca
Figura clave de la Generación del 27. Influencias de su infancia campesina. Temas: niñez perdida, homosexualidad como esterilidad, obsesión por la muerte. Trayectoria poética: búsqueda de una estética propia. Obras: Libro de poemas, Canciones, Romancero Gitano, Poema del Cante Jondo, Poeta en Nueva York, Llanto por Ignacio Sánchez Mejías, Seis poemas galegos, Diván del Tamarit, Sonetos del amor oscuro. Temas: amor, muerte, infancia, social. Mundo poético trágico y violento.
Manuel Machado
Admiraba a Rubén Darío. Obras: Alma (influencia modernista), El mal poema (poesía urbana), Cante hondo, Ars moriendi (tono reflexivo y resignado).
Ramón Gómez de la Serna
Promotor de las vanguardias. Creador de las greguerías: metáforas humorísticas y textos breves con asociaciones ilógicas que producen sorpresa.
Miguel de Unamuno
Poesía anómala. Esfuerzo por liberar la lengua poética del énfasis retórico. Crítica al modernismo. Obras: El Cristo de Velázquez, Poesías, Rosario de sonetos líricos, Rimas de dentro, Teresa, Poemario de la dictadura, Cancionero.
Rubén Darío
Iniciador del modernismo. Obras: Epístolas y poemas, Abrojos, Otoñales, Azul (mundo fantástico, objetos exóticos, exquisitez aristocrática), Prosas profanas (innovaciones métricas y verbales, placer erótico), Cantos de vida y esperanza (preocupación social, problemas del mundo hispánico, reflexión existencial).