Modernismo

El Modernismo, corriente literaria, surgió en Hispanoamérica hacia 1880 gracias a un grupo de escritores inconformistas. Sus rasgos más importantes son:

• Atracción y seducción por lo raro, lo singular.
• Amor a la elegancia, observación de lo estético.
• Mezcla de espiritismo y erotismo, tanto en prosa como en poesía modernista, se da la pasión por el misterio.
• Preferencia por el simbolismo, universalismo, exotismo y cosmopolitismo.
• Influencia del Parnasianismo y del Simbolismo.

Los modernistas se nutrieron de este tipo de autores. Poseen un lenguaje y estilo propios, su lengua se caracteriza por la abundancia de metáforas e imágenes. Bohemia, anarquismo y aristocracia van unidos a la estética modernista. Es bohemia y anarquista por no ajustarse a la sociedad y aristocrática por la búsqueda de la belleza estética.

Rubén Darío

Rubén Darío, máxima figura del Modernismo, contribuyó a renovar la lírica. De personalidad compleja y contradictoria, con un temperamento emocional e idealista, sentía pasión por la belleza y angustia existencial. Para él, la poesía era una forma de vida. Su obra se divide en diversas etapas poéticas:

• 1ª etapa: Poeta en formación, imita a los románticos españoles con el proyecto de renovar la métrica de la lírica española.
• 2ª etapa: Escribe Azul y, con él, nace el Modernismo. Se fija en la estética parnasiana: variedad de ritmos, estilo leve, tono vitalista.
• 3ª etapa: Publica Prosas Profanas, se fija en los aspectos musicales y el ritmo de los versos, y utiliza gran variedad de estrofas. Reivindica la tradición poética hispanoamericana y el arte como forma de expresión. En Prosas Profanas, el tema principal es el amor.
• 4ª etapa: Escribe Cantos de vida y esperanza, los cisnes… y otros poemas. Considerada su mejor obra de poesía, se centra en una poesía reflexiva, sincera y humana, con temas existenciales y políticos. Renueva el estilo, el lenguaje, las formas y los temas de la poesía española.

Manuel Machado

Manuel Machado recibió la influencia poética de Rubén Darío. Sus temas bohemios, con un toque aristocrático, se recogen en su obra Adelfos. Más tarde, se centra en una poesía intimista. Incluye formas y motivos folclóricos andaluces, con inspiración en lo popular, donde en sus temas incluye gitanos, toros, etc., despreciando la vida burguesa. También cultiva temas decadentistas (El jardín gris), además de los literarios (Castilla) y artísticos (Las lanzas de Velázquez) con un lenguaje pictórico y descriptivo. Sus obras más famosas son Alma, El mal poema y Cante hondo.

Generación del 98

Características de la Generación del 98:

• Nacimiento en años cercanos.
• Formación autodidacta.
• Experiencia vivida: pérdida del imperio colonial (1898).
• Posturas radicales en la juventud que evolucionan a posturas más conservadoras.
• Lenguaje generacional.
• Espíritu crítico e inconformista.
• Se centran en el problema de España.
• Ideología antiburguesa.
• Deseo de modernizar el país.
• Profunda renovación de la literatura e inclinación hacia el subjetivismo.

Miguel de Unamuno

Unamuno, nacido en una familia burguesa vasca, estudió Filosofía y Letras en Madrid. Fue rector de la universidad, creyó en el marxismo y el socialismo. En 1924 fue desterrado a Fuerteventura, en 1934 se jubiló de su cátedra y murió en 1936. Aunque es más importante como ensayista, novelista, dramaturgo y articulista, su poesía es conceptual y densa de significado, donde predominan los temas existenciales, metafísicos y el misticismo. Su lenguaje poético es discursivo, meditativo, con un tono emocional. Su léxico es rico en paradojas y sigue el ritmo del pensamiento. Se caracteriza por la sobriedad expresiva, el verso libre y las estrofas tradicionales. Los temas que trata son la familia, la patria y la religión, marcados por un sentimiento trágico de la vida. No se da a conocer en sus obras hasta los 43 años. Su primera obra, Poesías, y Rosario de Sonetos Líricos tratan temas religiosos y el debate entre la fe y la incredulidad. El Cristo de Velázquez es una de sus obras más importantes. En Teresa habla de un enamorado que muere por el amor de su novia. De Fuerteventura a París habla de la mala experiencia del destierro y en Romancero del destierro habla del exilio a Francia. Su producción se cierra con Cancionero Diario Poético. Toda su obra influye en los autores de la Generación del 36.

Antonio Machado

Antonio Machado se educó en la Institución Libre de Enseñanza. Con la muerte de su padre, se fue a París y más tarde regresó a Madrid. En 1927 ingresó en la Real Academia y en 1936 falleció en Francia. Su obra poética incluye tres libros: Soledades, Galerías y otros poemas. Emplea un lenguaje contenido y discreto, y su concepto de poesía es más existencial y espiritual. Emplea la subjetividad con el fin de identificarse para universalizarse y medita sobre el paso del tiempo, un tema recurrente en todos sus poemas. Emplea un lenguaje propio, con un tono nostálgico y usa palabras-símbolo. Su lenguaje poético cuida la adjetivación y alterna rima asonante y consonante. Campos de Castilla, su otra gran obra, giró en torno a su trayectoria poética con un cambio de perspectivas de temas y tono, donde se interesa por el paisaje y el paisanaje, con afinidad con el espíritu noventayochista. En esta obra incluye: 1- poemas descriptivos y reflexivos sobre cómo son los hombres de Castilla; 2- Campos de Soria, nueve poemas de tono íntimo; 3- La tierra de Alvargonzález, un cuento-leyenda; 4- poemas finales inspirados en Leonor. En Campos de Castilla emplea un lenguaje poético sencillo y austero, con sobriedad y naturalidad expresivas. Su último libro, Cancionero Apócrifo, reflexiona sobre distintos temas: filosofía, moral, sociedad y amor.

Azorín

Azorín, magnífico ensayista, es el hombre reflexivo que analiza minuciosamente los detalles de la vida cotidiana y nos descubre en ellos un riquísimo mundo de sugerencias y asociaciones. Tres temas fundamentales recorren su obra: la meditación sobre el paso del tiempo, la evocación del pasado y la recreación subjetiva del paisaje. Es característico su desinterés por la acción. El tiempo transcurre lentamente, sin argumento. En la contemplación y descripción del paisaje es donde muestra su capacidad literaria, siendo el paisaje el protagonista de la obra. Su arte se manifiesta especialmente en la descripción, que nos acerca al detalle, a las cosas minúsculas que pasan inadvertidas. Su técnica es impresionista. Su prosa, muy cuidada y estética, es de admirable pulcritud estilística. En su sintaxis predomina la oración breve y la coordinación.

Obra ensayística:

• La ruta de Don Quijote: visión personalísima sobre la geografía manchega.
• Los pueblos: intenta penetrar en el alma española.
• Castilla: dedicado a esta región, refleja el paso del tiempo.

Obra narrativa:

• La voluntad y Antonio Azorín y Las confesiones de un pequeño filósofo forman una trilogía protagonizada por él. La idea de la inutilidad y vanidad de todo esfuerzo humano paraliza cualquier impulso.