EL TEATRO DEL BARROCO
El teatro presentó los cambios más radicales, tanto en contenidos como en formas. El género dramático superó con creces la producción existente hasta entonces.
La comedia nueva
La renovación y consolidación de la fórmula teatral barroca fue llevada a cabo por Lope de Vega, que tomó conciencia de que el teatro español debía comenzar su propio camino mediante un “nuevo arte”.
– Armonizó lo aprovechable del teatro anterior, con unas formas más libres que se apartaban de las normas clasicistas.
– Ofreció al público un teatro cercano y familiar en sus asuntos y contenidos.
– Encarnó el sentimiento monárquico, el concepto del honor y la honra…
– Proporcionó “teatralidad”: agilidad escénica, interés, gracia…
– Concibió la pieza teatral como un espectáculo total, con una buena puesta en escena.
El teatro se profesionalizó y gozó de lugares fijos, los corrales de comedias, que no eran teatros, sino patios de vecindad.
Renovaciones técnicas de la comedia nueva
La renovación de Lope no se limitó a la actitud, sino sobretodo a la técnica teatral. Los cambios fueron:
– Reducción a tres actos: planteamiento, nudo y desenlace.
– Concepción de la comedia como una intriga en incesante movimiento de escenas, saltos de lugar y tiempo…
– Transgresión de la regla aristotélica de las tres unidades (lugar, tiempo y acción).
– Mezcla de lo trágico y lo cómico, que supuso una nueva forma, la tragicomedia o el drama.
– Reacción contra la unidad métrica de la obra y utilización de la polimetría según el desarrollo de la acción.
– Variedad de estrofas según el desarrollo de la acción.
– Decoro expresivo: presentación del habla de acuerdo con la edad y condición de cada personaje.
– Configuración de la comedia en torno a una estructura fija de personajes: la dama, el galán, el gracioso, la criada, el villano, el poderoso….
– Convergencia de la acción dramática en el sentimiento amoroso, y más aún, en la honra.
El tema del honor y la honra
Lope convirtió el tema del honor y la honra en uno de los principales motores de su teatro:
– El honor era privilegio de los nobles, heredado y fundamentado en los antepasados. Lope igualó en el honor y en su defensa a señores y a plebeyos y villanos, siempre que estos fueran limpios de sangre.
– La honra era una virtud personal que no se heredaba, sino que se sustentaba en la opinión que los demás tenían de uno mismo.
El honor tuvo un valor absoluto equiparable a la vida, y su quiebra equivalía a la muerte social. La deshonra debía ser reparada hasta con la vida, y el orden social se restauraba mediante la venganza.
Los dos ciclos de la “comedia nueva”
Suele agruparse el teatro clásico español del Barroco en dos cilos en torno a sus dos máximos representantes: Lope de Vega y Calderón de la Barca. Las diferencias entre los dos estuvieron determinadas por la personalidad y las divergencias estilísticas entre ambos autores.
Lope de Vega
Gozó de tan portentosa creatividad, que además de cultivar todos los géneros, escribió un conjunto de 1800 comedias y 400 autos sacramentales. De todo esto se conservan unas 500 obras.
La temática de su teatro fue variada de acuerdo con el espíritu del autor, alternante entre el amor divino y la pasión humana.
Sus comedias se dividían en:
– De tema profano: pastoriles, mitológicas, históricas de tema extranjero, costumbristas y de capa y espada, históricas y legendarias nacionales.
– De tema religioso: bíblicas y de santos.
Entre sus seguidores destacan: Guillén de Castro, Juan Ruiz de Alarcón, Luis Vélez de Guevara y Antonio Mira de Amescua.
Tirso de Molina
Fue el más importante entre los seguidores de Lope. Su amplia producción dramática se caracteriza por la variedad temática y genérica. Aportó las siguientes novedades:
– Fue el gran creador de caracteres del teatro español. Algunos de sus personajes, como don Juan, se han convertido en mitos.
– Indagó siempre en el tratamiento psicológico de sus personajes.
– Dio protagonismo a las mujeres, heroínas de intensa caracterización, astutas y ricas en matices.
– Se preocupó por temas teológicos, éticos y trascendentes como la predestinación o el libre albedrío.
– Eludió los asuntos de la tradición nacional y se inspiró en la realidad social y religiosa de la época.
Sus comedias se dividen en: religiosas, históricas, comedias de carácter y dramas de carácter y sentido teológico.
Calderón de la Barca
Calderón significó la culminación del teatro del Siglo de Oro. Recogió en un primer estilo las renovaciones de Lope y elevó al máximo la expresión del tema del honor en su obra “El alcalde de Zalamea”. En un segundo estilo, se apartó del maestro y profundizó en sus preocupaciones filosóficas y existenciales. Su título emblemático fue “La vida es sueño”,que sintetizó la idea barroca del desengaño y el libre albedrío.
Su producción alcanzó los 110 títulos, y pueden clasificarse en:
– Dramas: religiosos, filosóficos, trágicos y de honor.
– Comedias de enredo y de capa y espada.
– Autos sacramentales.
Los seguidores más importantes fueron: Francisco Rojas Zorrilla y Agustín Moreto.