Evolución de la Poesía Española: Siglo XX a la Actualidad

Lírica del Siglo XX hasta 1939

Inicios de Siglo: El Modernismo

A finales del siglo XIX, los gustos estéticos se ven modificados debido a un cambio de mentalidad artística, que recupera principios del Romanticismo como la originalidad o la libertad creadora. La situación de crisis a finales del siglo XIX provocó un cambio en el rumbo artístico. El movimiento literario que corresponde a este periodo es el Modernismo, se inspira en el Parnasianismo y el Simbolismo. Los temas básicos del Modernismo son la soledad, el escapismo, el cosmopolitismo, el amor y el erotismo. La nueva estética se caracteriza por el afán de innovación, originalidad, y la búsqueda de la perfección formal.

  • Rubén Darío y Manuel Machado son los principales representantes del Modernismo de corte parnasiano. El poeta nicaragüense evoluciona desde una estética parnasiana en Azul o Prosas profanas hacia temas más graves y trascendentes en Cantos de vida y esperanza.
  • Antonio Machado será el principal poeta del Modernismo simbolista. Su primera obra, Soledades, galerías y otros poemas reflexiona acerca del paso del tiempo y la muerte, dos temas constantes en el poeta sevillano. En su segunda obra, Campos de Castilla, aparece el tema de España además de una serie de poemas dedicados a su mujer, Leonor, antes y después de su temprana muerte.
  • Juan Ramón Jiménez se inicia en la estética modernista (Arias tristes, Sonetos espirituales). El poeta moguereño entiende la escritura como una búsqueda constante de la belleza y de la perfección. Por otra parte, concibe la poesía como un medio para analizar y entender la realidad. El deseo de eternidad es otro de sus temas constantes. Diario de un poeta recién casado o Dios deseado y deseante son algunas de sus obras fundamentales.

Vanguardia y Generación del 27

Los movimientos de Vanguardia comienzan a revolucionar el panorama artístico occidental. Futurismo, Cubismo, Expresionismo, Dadaísmo o Surrealismo más Creacionismo y Ultraísmo, traerán formas transgresoras y rupturistas. Los poetas del 27 conciben la poesía como un arte capaz de interpretar y renovar la realidad, se dedican intensamente a su labor buscando siempre la perfección formal y conceptual.

  • Vicente Aleixandre. Fue premio Nobel en 1977. Sus temas son el amor como impulso erótico que lleva a la destrucción y la naturaleza como fuente de vida. A su primera etapa corresponde Espadas como labios, Sombra del paraíso y La destrucción o el amor y a su segunda etapa Historia del corazón y Poemas para la consumación.
  • Federico García Lorca. Sus libros suponen una fusión de lo tradicional con la vanguardia y la poesía pura. Destaca Poema del cante jondo y Romancero gitano, piezas de tema andaluz. Más tarde compone Poeta en Nueva York, obra surrealista, Llantos por la muerte de Ignacio Sánchez Mejías y los Sonetos del amor oscuro son las últimas obras, donde aúna amor, erotismo, angustia y trascendencia.
  • Rafael Alberti. Se inicia con Marinero en tierra, El alba del alhelí. Le sigue una etapa gongorina (Cal y Cantos) y otra surrealista Sobre los ángeles. Con la llegada de la República y la Guerra, Alberti hizo libros como Un fantasma recorre Europa, De un momento a otro, Capital de la gloria. En el exilio no dejó de escribir y compuso Entre el clavel y la espada, Roma, peligro para caminar y Retornos de lo vivo lejano.
  • Luis Cernuda. Es el poeta del amor por excelencia y el primer libro que compuso fue Perfil del aire, con poesía pura. A continuación escribió libros surrealistas como Un río, un amor, Los placeres prohibidos, Donde habite el olvido. Sus grandes obras son La realidad y el deseo y Ocnos. El primero es el título de su poesía completa: soledad, angustia, deseo de belleza absoluta; aspira a llegar a la comunicación mediante el amor. Su poesía del exilio en México está en los libros titulados Con las horas contadas, Desolación de la quimera. Es el poeta que más ha influido en las generaciones posteriores.

Lírica desde 1940 a los años 70

Los Primeros Años

La poesía de la primera posguerra está fuertemente condicionada por la situación histórica española. Ante el horror de la guerra recién concluida, los poetas buscan respuestas y se rebelan ante él. Con posterioridad, se vuelven los ojos hacia los demás y los poetas desearán convertirse en la voz de la mayoría, surge la poesía social.

La actividad lírica de esta época se centra fundamentalmente en la colaboración en revistas literarias:

  • Garcilaso agrupa a los poetas más cercanos al régimen oficial que ofrece una visión optimista del hombre y el mundo: Luis Rosales, Leopoldo Panero.
  • Espadaña es la revista de los poetas contrarios al régimen, que aportan una visión desarraigada de un mundo conflictivo e imperfecto: Leopoldo de Luis, Blas de Otero.

Pablo García Baena y el grupo “Cántico”

En la posguerra tuvo lugar la poesía pura, gracias a un grupo de poetas cordobeses que fundaron en 1947 la revista Cántico. Pablo García Baena es principal representante del grupo. El amor es el tema fundamental. El grupo se compone de otros autores cordobeses: Juan Bernier, Ricardo Molina.

El Postismo

La revista Postismo da nombre al último de todos los ismos, que se autodefine como surrealismo ibérico. El gaditano Carlos Edmundo de Ory es su fundador.

Poesía Espiritual. Poesía Social

La primera poesía de posguerra se caracteriza por un tono individualista. Los poetas alzan sus ojos a Dios para pedirle explicaciones acerca de lo que observan a su alrededor. Poco a poco, se irá modificando esta tendencia inicial, de manera que a finales de los cuarenta surge en España una poesía denominada social en la que asistimos a una evolución del yo al nosotros. Los dos autores más representativos de este momento son Gabriel Celaya y Blas de Otero. En estas fechas empieza también a escribir José Hierro, poeta más personal y reconocido en la segunda mitad del siglo XX. La poesía social evita los problemas íntimos, individuales, para centrarse en lo colectivo. Se rechaza el esteticismo y la poesía pura. De este modo, se pretende crear una poesía clara, para la inmensa mayoría, que incluso emplea rasgos coloquiales en su afán de claridad.

La Generación de los 50

A mediados del siglo XX irrumpe en el panorama literario un nuevo grupo de poetas que se aparta de la poesía social. Nos referimos a poetas como Antonio Gamoneda, Ángel González, Jaime Gil de Biedma y Claudio Rodríguez. La poesía de estos también se preocupa por el hombre, poesía inconformista y escéptica que se centra en lo cotidiano y recupera el intimismo. Se observa en estos poetas una clara preocupación por la estética.

Lírica desde los años 70 a nuestros días

Los Novísimos

Tras la revolución cultural del 68, surge un nuevo grupo de poetas conocido como Generación del 68 o novísimos. Los novísimos sienten a Aleixandre o Cernuda como modelos y revitalizan al grupo Cántico y al Postismo. El nombre de este grupo de poetas proviene de la antología Nueve novísimos poetas españoles, publicada en 1970.

Desde los años 70 se advierte una mayor variedad en la lírica española. La década se inicia bajo la influencia de los novísimos y aparecen nuevas tendencias:

  • Experimentalismo: basado en la utilización de las antiguas técnicas vanguardistas.
  • Culturalismo: influencia del mundo clásico grecolatino o la Edad Media.
  • Surrealismo: en los 80 podemos destacar una línea de recuperación del Surrealismo, en la que descuellan las poetas Blanca Andreu o Ana Rossetti, poesía erótica.
  • Poetas metalingüísticos: Se orienta hacia la indagación sobre el lenguaje. Son rasgos de esta poética la ausencia de adornos superfluos y el antirretoricismo.
  • Poesía de la conciencia: Los poetas pretenden sacudir la conciencia, la poesía se concibe como acción social y hasta política. Incluimos dentro de esta tendencia a David González, Pablo García Casado.
  • Poesía de la experiencia: Es la tendencia poética más característica de los últimos años. Tras la estética novísima, se produce una recuperación de la generación del medio siglo y una revisión de la tradición literaria previa. Se recuperan ciertas formas métricas combinadas con el uso de un lenguaje perteneciente al mundo cotidiano. No faltan elementos irónicos ni humorísticos. Destacan temas de la infancia o la adolescencia y se aprecia un lenguaje elaborado y elegante.

La Nueva Novela Hispanoamericana: El Boom

En los años 60 nos encontramos con autores que continuaron las innovaciones emprendidas por sus predecesores, llevándolas más lejos y aportando nuevos recursos, ahondando en el realismo mágico.

  • Gabriel García Márquez. Entre sus obras están El coronel no tiene quien le escriba y Cien años de soledad. Podemos destacar Crónica de una muerte anunciada y El amor en los tiempos del cólera.
  • Julio Cortázar. Estupendo autor de cuentos (Historias de cronopios y de famas) y novelista (Rayuela).
  • Mario Vargas Llosa. Asombró con La ciudad y los perros aunque su obra más destacada sea Conversación en la catedral.
  • Ernesto Sábato. Es el autor de El túnel, Sobre héroes y tumbas y Abaddón el exterminador.
  • Carlos Fuentes. Entre sus títulos sobresalen La región más transparente y La muerte de Artemio Cruz.

A la Sombra del Boom: Últimos Novelistas

Entre los nuevos novelistas destacan:

  • Manuel Puig. Con su obra más importante El beso de la mujer araña.
  • Alfredo Bryce Echenique. Una de sus obras más representativas es Un mundo para Julius.
  • Isabel Allende. Su novela La casa de los espíritus supuso un éxito de ventas mundial.

Como cuentistas, además de los señalados, debe destacarse a Augusto Monterroso (Lo demás es silencio), Mario Benedetti (Buzón del tiempo) y Eduardo Galeano (Las bocas del tiempo; Espejos).