Panorama de la Literatura Española: Poesía y Teatro desde los Años 50 hasta la Actualidad
La Poesía Española: Un Viaje desde los Años 50 hasta Hoy
Panorama General: A mediados de los años cincuenta, surge un nuevo grupo de poetas que retoma la preocupación por el carácter artístico de la poesía. Su obra se consolida en la década de los sesenta, donde a finales aparecen los novísimos.
La Promoción de los Años 60
La poesía pierde peso como mera comunicación y se concibe como experiencia o conocimiento. Se caracteriza por:
- Lo íntimo y el gusto por el recuerdo.
- La subjetividad y la preocupación por la situación española.
- La búsqueda de naturalidad en el lenguaje, con inclinación hacia lo narrativo y coloquial.
Estos renovadores, conocidos como la “promoción de los años sesenta”, incluyen a figuras como Ángel González, Claudio Rodríguez, Francisco Brines y Carlos Barral. Sus obras comparten rasgos como:
- Un concepto de la poesía como medio de conocimiento de la realidad y vivencias personales, con un tono autobiográfico.
- Temas íntimos y cotidianos.
- Un lenguaje coloquial elevado a nivel artístico, creando una conversación íntima con el lector.
- El uso de la técnica conversacional, donde el poeta se dirige a un interlocutor y se convierte en personaje de su propio poema.
La Década de los Años Setenta: Los Novísimos
Los poetas de esta década persiguen un ideal estético innovador y experimental, siendo herederos de las vanguardias. Renuevan la concepción poética, la estética y los temas. Sus características principales son:
- Rechazo de las estrofas tradicionales y uso del verso libre.
- Estilo con elementos surrealistas.
- Huida de la realidad mediante elementos exóticos y el monólogo dramático.
- Culturalismo, con alusiones culturales que dificultan la comprensión.
- Temática diversa, con interés en la cultura de los medios de comunicación.
Últimas Tendencias
A partir de los años ochenta, la lírica rechaza los aspectos de los novísimos y regresa a la poética de los años cincuenta, volviendo a ser un vehículo de comunicación. La lírica se humaniza, dejando atrás lo superficial. Los poetas de esta década manifiestan su gusto por la poesía intimista, denominada después como poesía de la experiencia.
El poeta se presenta como un ser corriente, adoptando un lenguaje sencillo y coloquial. Los temas se acercan a lo cotidiano y a asuntos realistas que afectan al individuo moderno. En los últimos años, se multiplican las corrientes poéticas, marcadas por un rasgo posmoderno: el poeta queda sin la referencia de una estética dominante, dando lugar a la “poesía de la diferencia”, que defiende la pluralidad de estilos.
El Teatro Español: De la Posguerra a la Renovación
Introducción
Al terminar la Guerra Civil (1936-1939), el teatro español había perdido a autores como Valle-Inclán, Lorca o Unamuno. Muchos otros estaban en el exilio. Mientras en Europa se representaba teatro épico y del absurdo, en España predominaba un teatro burgués convencional, destinado a entretener a una burguesía conservadora. La censura impedía obras con contenidos críticos. Esta situación cambió en 1949 con Historia de una escalera, que inició un camino hacia la renovación.
Teatro Burgués
En los primeros años de la posguerra, resurgió la comedia costumbrista.
Teatro Poético o de Ensueño
Su temática se centra en la lucha entre realidad y fantasía, y en la defensa del amor como método para superar conflictos. Destacó Alejandro Casona, con La dama del alba.
Teatro de Humor
El humor se caracteriza por situaciones inverosímiles y diálogos absurdos, con los que se critica irónicamente a la sociedad. Influyó en el teatro experimental. Destacan:
- Enrique Jardiel: Teatro de evasión con personajes burgueses y dinámicos. Obras como Los ladrones somos gente honrada.
- Miguel Mihura: Crítica de los convencionalismos sociales. Tres sombreros de copa.
El Teatro Existencialista y Social
En los años cincuenta, surge un teatro que lleva a los escenarios los problemas existenciales y los dramas de las clases humildes. Es un teatro realista que critica las injusticias sociales. Destacan:
- Antonio Buero Vallejo (1916-2000): Inicia en 1949 con Historia de una escalera, rompiendo con el teatro burgués. Sus obras tienen personajes con actitudes opuestas, dramas con personajes con taras y efectos de inmersión.
- Alfonso Sastre (1926): Teatro social con actitud de denuncia. Escuadra hacia la muerte.
En los años sesenta, ambos abren el camino a una generación de jóvenes que escriben y estrenan sus obras. Este teatro se caracteriza por:
- Temática realista.
- Personajes víctimas de situaciones extremas.
- Lenguaje preciso y cuidado.
El Nuevo Teatro Experimental
A finales de los sesenta y principios de los setenta, algunos dramaturgos inician nuevas líneas teatrales basadas en la experimentación, influenciados por el teatro europeo. Consideran que el teatro debe integrar diversas disciplinas artísticas, siendo el texto solo un aspecto más. En los años 70 surgen compañías teatrales independientes con nuevas técnicas y lenguajes, potenciando elementos estéticos y audiovisuales.
El Teatro en los Últimos Años
Este género se ve favorecido por la desaparición de la censura, las subvenciones, la creación de un Centro Teatral, la importancia de las Escuelas de Arte Dramático, la aparición de nuevas editoriales y festivales de teatro. Sin embargo, el florecimiento teatral no se produjo debido a la competencia del cine. En los años ochenta destaca Antonio Gala. Las protagonistas son generalmente mujeres y sus temas tratan sobre conflictos individuales. Los verdes campos del Edén. José Luis Alonso de Santos, con una comedia que refleja aspectos de la sociedad actual. El actor Fernando Fernán Gómez (1940-2007), dentro del realismo, triunfó con Las bicicletas son para el verano. Finalmente, José Sanchís Sinisterra (1940) presenta obras que reflexionan sobre la naturaleza del propio teatro. ¡Ay, Carmela!. En Extremadura, destacan Manuel Martínez Mediero, Miguel Murillo, con Dogma de fe, y Jorge Márquez.