Literatura del siglo XVIII

1. Rococó

Se denomina así a las últimas manifestaciones del Barroco, que deriva hacia un arte de evasión, detallista y decorativo. De poco valor y trascendencia.

2. Neoclasicismo

A mediados del siglo XVIII, surge el Neoclasicismo, un movimiento que marca la vuelta al sentimiento y a la Naturaleza.

3. Características del Neoclasicismo

3.1. Equilibrio y mesura

El arte neoclásico busca la belleza con orden y mesura, sin extremismos. Es frío, academicista; formalmente perfecto, pero a veces carente de vitalidad.

3.2. Verosimilitud

Se desecha todo lo que no sea racional y verosímil.

3.3. Respeto a las reglas

Las normas y reglas se consideran superiores a la libertad, la inspiración o la interpretación personal del artista. Una obra será mejor cuanto más se aproxime al modelo propuesto por las reglas.

3.4. El arte como técnica

Se cultiva como un oficio o técnica, que se aprende y perfecciona siguiendo las reglas.

3.5. La poética

Se defiende la separación de lo trágico y lo cómico, el respeto a la norma de las “tres unidades” (acción, lugar y tiempo) y el uso normalizado de los diferentes metros y estrofas.

3.6. Finalidad didáctica

El valor estético se relaciona con la utilidad moral o práctica. Tiene un fin social, por lo que se valora la facilidad de comprensión.

3.7. Utilidad de la literatura

Deja de ser “imaginativa” para ampliar su campo temático a todo lo “cultural”. El literato debe ser culto, intelectual y polifacético. Se amplía el concepto de “literatura” con nuevos géneros: ensayo, género epistolar, artículo periodístico, informe, reseña bibliográfica, comedia burguesa, etc. Se revitalizan otros como los libros de viaje o las obras sobre temas anacreónticos y delicados.

3.8. Polémicas

Abundan las polémicas entre el racionalismo innovador y el tradicionalismo.

4. Temas del Neoclasicismo

La amplitud del concepto de literatura en el Neoclasicismo hace que cualquier tema pueda ser adecuado.

5. Lengua y estilo

Se da un proceso de degeneración del lenguaje hacia un tono vacuo y pedante. Las nuevas necesidades de uso en la crítica, ensayo, sátira, obras científicas, etc., exigen una lengua más clara, sencilla y precisa. Se emprende una reforma de la lengua buscando una mayor capacidad y calidad expresiva. Se busca un lenguaje culto y mesurado, abandonando los ornatos, excepto en la lírica, donde se toleran discretamente.

6. Géneros y autores

6.1. Ensayo

Textos en prosa donde el autor expresa sus ideas sobre diversos temas. Su forma discursiva es la exposición y la argumentación. Es el género predilecto para divulgar los principios de la Ilustración. Adopta diversas formas: epistolar, memorias, informes, libros de viajes…

• Benito Jerónimo Feijoo (Padre Feijoo): Escribió Teatro crítico universal y Cartas eruditas y curiosas. Su prosa destaca por su sencillez.
• José Cadalso: Escribió Cartas marruecas, una obra donde tres personajes intercambian cartas, permitiendo al autor una visión crítica de la realidad española.
• Gaspar Melchor de Jovellanos: Sus ensayos se dirigen a los grupos dirigentes. Escribió, entre otros, el Informe en el expediente de la ley agraria y Memoria sobre espectáculos y diversiones públicas.

6.2. Teatro

El teatro neoclásico o comedia de buenas costumbres respeta la ley de las tres unidades. Conjuga el fin didáctico con la amenidad.

• Leandro Fernández de Moratín: Su principal obra es El sí de las niñas, que trata el tema del matrimonio de conveniencia y critica el ambiente español.

6.3. Poesía

En la poesía ilustrada o neoclásica se distingue una vertiente filosófica y utilitaria y otra más tierna y sensual.

• Poesía filosófica y utilitarista: Busca educar e ilustrar. Sus temas son la exaltación de las bellas artes, las novedades científicas, las ideas de reforma social, etc.
• Poesía sensual: Su composición característica es la anacreóntica. Exalta el amor y los goces sensuales.
• Meléndez Valdés: Máximo representante de la poesía sensual.