‘Bajarse al Moro’ de José Luis Alonso de Santos: Un Retrato de la Juventud de los 80
Contexto y Género
Bajarse al Moro es una obra escrita por José Luis Alonso de Santos en 1985. Se encuadra dentro del llamado teatro neorrealista, que trata temas relacionados con los problemas de la juventud de la época, como las drogas o la delincuencia.
Pertenece al género dramático, aunque no respeta las tres unidades clásicas. Hay más de una acción que, además, se desarrolla en varios días. Sin embargo, sí se respeta la unidad de escena, pues todo ocurre en la habitación de un piso de Madrid donde viven los protagonistas.
Personajes y Temas
Los personajes principales son cuatro jóvenes que se dedican a traer hachís desde Ceuta para luego venderlo por Madrid y así ganarse la vida. También aparece la madre de uno de los protagonistas (Alberto), doña Antonia, una mujer histérica que padece de cleptomanía, aportando un cierto carácter cómico debido a las situaciones que provoca.
A lo largo de la obra se tratan muchos temas diferentes, como:
- La búsqueda de un lugar en el mundo
- La rebeldía o el inconformismo social
- El dinero
- La amistad y la solidaridad
- Los estereotipos sociales
- La droga
Sin embargo, el tema dominante se puede ver en la intención del autor: la crítica a la sociedad a través del mundo que viven un grupo de jóvenes en Madrid en los años 70 y 80.
Estilo y Lenguaje
Esta obra presenta acotaciones típicas de las obras teatrales, es decir, para aportar información sobre el modo de hablar de los personajes, su colocación o su tono. También hay monólogos en los que quedan expuestos los sentimientos, como es el caso de Jaimito. Los diálogos están escritos en un registro coloquial, con numerosos vulgarismos que reflejan el modo de hablar de los jóvenes de la época y dotan a la obra de ritmo y sencillez.
Reflejo de una Época
Llama la atención en esta obra lo bien que se refleja la vida de los jóvenes de los 80, quienes no buscaban estudiar, sino independizarse y ganarse la vida como fuera. El toque de humor que tiene la hace fácil y amena de leer, aunque también tiene una parte dramática al final.
‘Luces de Bohemia’ de Valle-Inclán: Esperpento y Crítica Social
Introducción al Esperpento
Luces de Bohemia, publicada como libro por primera vez en 1924, fue escrita por Ramón María del Valle-Inclán (importante dramaturgo, poeta y novelista español, 1866-1936, perteneciente a la corriente del modernismo y muy cercano a la generación del 98 en sus últimas obras). Con esta obra, Valle-Inclán introdujo importantes innovaciones al panorama literario contemporáneo y creó un nuevo género: el esperpento. Este se define como una forma de ver la realidad que la distorsiona para encontrar la verdadera imagen que se oculta tras ella, con recursos como la caricatura, la ironía y la burla.
Estructura y Argumento
La obra, formada por un total de quince escenas, transcurre en una noche y recoge las últimas horas del poeta ciego Max Estrella, así como su recorrido nocturno por el Madrid de la época. A pesar de que su muerte se produce en la escena número doce, la acción continúa durante tres escenas más, siguiendo con la crítica a la realidad social y política española de la época. Algunos de los temas predominantes son la vida bohemia, la muerte y la continua crítica a la situación en España. Vemos así que el género esperpento se encuentra presente en toda la obra.
Personajes y Estilo
Los personajes principales son Max Estrella y Don Latino. Max es un poeta que se ha quedado ciego, pero también es el único que comprende la trágica realidad. Lo podemos ver, por ejemplo, cuando comprende el dolor de la madre que pierde a su hijo. Don Latino es un amigo de Max, se aprovecha de su generosidad y es un personaje ruin que vive al día. Los personajes secundarios podemos dividirlos en dos grupos: los caricaturizados, aquellos que son criticados por Valle-Inclán, como los ministros, el dueño de la librería o el propio Don Latino; y los realistas, los que son puestos en escena tal y como son, con un tono trágico, como por ejemplo la madre que pierde a su hijo.
Destaca, por un lado, la enorme variedad de lugares (parque, cárcel, librería, bar…) y, por otro, el tiempo concentrado, ya que la obra se desarrolla en un margen breve, entre las 21:00 y las 7:00 del día siguiente. El uso del lenguaje es magnífico, incluidas las acotaciones. Tiene un léxico difícil y en ocasiones inventado; mezcla el lenguaje vulgar y el culto en un mismo personaje.
Reflexiones sobre la Obra
Personalmente, llama la atención la propia historia de Max y cómo se desarrolla, ya que, de salir de su casa a reclamar un pago más justo por sus obras, pasa a recorrer los barrios de Madrid viviendo una gran cantidad de situaciones: desde su arresto y estancia en el calabozo, hasta su liberación gracias a sus conocidos en la redacción de El Popular, pasando por sus encontronazos con personas como la gitana “La Lunares” o la mujer que llora la pérdida de su hijo.
Finalmente, Luces de Bohemia parece una obra difícil de representar debido a retos como los numerosos cambios de escena, la gran cantidad de personajes o el papel de algunos animales (aunque este último aspecto es de poca relevancia en el conjunto). También se percibe una crítica que, siendo constante, está bien repartida y es dinámica, ya que cambia de enfoque, pero siempre apunta en las mismas direcciones: sociedad, política, economía e incluso religión.