Introducción y Justificación
La cita de Montessori (2009 [1928]) afirmando que: “la educación de los pequeños es la cuestión más importante para el porvenir de la humanidad”, refleja la transformación a la que el mundo está destinado y cuyos responsables somos las personas.
La escuela no puede obviar estos hechos y somos responsables de educar vocacionalmente a través de una enseñanza de calidad, en colaboración con el resto de la comunidad educativa, con la motivación común de construir un mundo mejor.
Con este propósito, en nuestro país, la Constitución Española (1978) en su artículo 27, proclama el derecho de todos a una educación que asegure la igualdad de oportunidades de los ciudadanos y el respeto a la diversidad de sus identidades, necesidades e intereses (artículo 2. Principios, Ley 6/2008, de 26 de diciembre, de Educación de Cantabria).
La finalidad de la educación en la etapa de Primaria es que los alumnos “afiancen su desarrollo personal y propio bienestar y adquieran las habilidades culturales básicas y sociales, los hábitos de trabajo y estudio, el sentido artístico, la creatividad y la afectividad” (artículo 16. Principios generales de EP, Ley Orgánica 2/2006, de 3 de mayo de Educación (LOE en adelante), modificada por la Ley Orgánica 8/2013, de 9 de diciembre, para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE en adelante).
En definitiva, se trata de que desarrollen al máximo las competencias clave, los objetivos y contenidos establecidos en el Real Decreto 126/2014, de 28 de febrero, por el que se establece el currículo básico de Primaria y ampliados por el Decreto 27/2014, de 5 de junio, que establece el currículo de Primaria en Cantabria.
Para ello, es esencial transmitir desde el área de Ciencias Sociales la pasión y la curiosidad por conocer el origen y el desarrollo de la sociedad, de las instituciones y de las relaciones que configuran la vida social.
Próximamente, abordaremos todos los apartados del epígrafe del tema, para llegar a una serie de conclusiones. Finalmente, daremos con el listado y comentario de referencias, páginas web y el marco normativo y legislativo en el que nos circunscribimos, siguiendo el sistema APA.
Antes de comenzar, me gustaría puntualizar que creo importante el uso de un lenguaje inclusivo y no sexista; empero, por cuestiones obvias de tiempo, utilizaré el uso genérico del masculino.
1. Construcción de la Noción del Tiempo Histórico en la Educación Primaria
Es necesario que los discentes se sitúen cronológicamente en el tiempo histórico, conozcan los rasgos que les son propios y le caracterizan y que serán claves para que se entienda este periodo y la diferencia de otros.
Es imprescindible que sean conscientes de las causas y de las consecuencias del hecho histórico y de los hechos actuales, para no volver a cometer los mismos errores. En este sentido, transmitimos y ponemos en práctica los valores que respeten plenamente los derechos humanos, incluida la igualdad como base de la democracia (Anexo I, b. Ciencias Sociales, Decreto 27/2014).
Lo haremos fundamentalmente desde el área de ciencias sociales, incluida en el bloque de asignaturas troncales dándole un carácter obligatorio (artículo 18, organización, LOMCE) y partiendo de los objetivos y las competencias clave propios de la etapa, mediante el establecimiento de bloques de contenidos, criterios de evaluación y estándares de aprendizaje evaluables.
Enseñar y aprender ciencias sociales es mostrar pleno respeto de los derechos humanos, incluida la igualdad como base de la democracia. Esta actitud también incluye manifestar el sentido de la responsabilidad y mostrar comprensión y respeto de los valores compartidos y los principios democráticos, que caracterizan la cohesión de la comunidad.
El área ha de fomentar el desarrollo de hábitos de trabajo individual, de equipo y de esfuerzo como elemento esencial del proceso de aprendizaje y la responsabilidad en el estudio, así como actitudes de confianza en sí mismo, sentido crítico, iniciativa personal, participación, curiosidad, interés y creatividad en el aprendizaje y espíritu emprendedor (Decreto 27/2014).
Todos los contenidos son aprendidos de forma global en todas las áreas. Sin embargo, en el área de ciencias sociales adquieren de forma más específica conceptos como el tiempo histórico y su medida, la capacidad de ordenar temporalmente algunos hechos históricos y otros hechos relevantes utilizando para ello las nociones básicas de sucesión, duración y simultaneidad.
Aprenderán las grandes etapas históricas de la humanidad para adquirir la idea de edad de la historia y las cinco edades de la historia asociadas a los hechos que marcan sus inicios y sus finales, para lo que es preciso conocer las condiciones históricas, eventos y figuras en los diferentes periodos de tiempo. Lo harán de forma más específica a través del cuarto bloque de contenidos, llamado “Las huellas del tiempo” (anexo I, b, Ciencias sociales, Decreto 27).
2. Ámbitos de Estudio de Procesos y Hechos Históricos
Por un lado, a nivel individual, potenciaremos en el alumnado la iniciativa y autonomía personal, la curiosidad, la participación, la confianza en sí mismo, la responsabilidad frente al estudio, la creatividad, el espíritu emprendedor, el interés, el sentido crítico y el esfuerzo.
Por otro lado, fomentaremos la cooperación, la interacción y la participación a través del trabajo grupal para aprender a convivir en comunidad, a prevenir y solucionar conflictos a través del diálogo, a defender los derechos humanos, la igualdad de género y la valoración de la interculturalidad como riqueza del patrimonio cultural y humano de la sociedad actual.
Definitivamente, el estudio de los procesos y hechos históricos resulta esencial para lograr el desarrollo de las capacidades y los fines que acabamos de mencionar, ya que solo aprendiendo del pasado podemos trabajar el presente para asegurar un futuro mejor.
Se contempla también como fin la preparación para el ejercicio de la ciudadanía y la participación activa en la vida económica, social y cultural, con actitud crítica responsable y con capacidad de adaptación a las situaciones cambiantes de la sociedad del conocimiento.
3. El Aprendizaje de las Grandes Etapas Históricas de la Humanidad
En primaria, debemos enfocar el tiempo histórico como el relato de las formas de vida del pasado hasta las actuales, para que el alumnado comprenda que la historia es un ciclo continuo y analiza el presente para entender nuestras costumbres y actos cotidianos. Así, la historia deja de ser un relato aprendido de memoria y se convierte en algo razonable y lógico (Tarradellas, 2001).
Aprenderán la Prehistoria desde la aparición de los primeros humanos, pasando por sus etapas hasta la aparición de los primeros documentos escritos y las grandes etapas históricas de la humanidad: Edad Antigua, Edad Media, Edad Moderna, Edad Contemporánea y la historia actual, que se ha propuesto añadir a partir de la mitad del siglo XX.
Su secuenciación se adapta al desarrollo madurativo del alumno, partiendo de los conceptos más básicos, como antes, después, futuro, duración, día, semana, mes y año, para progresivamente aumentar la complejidad hasta llegar a los matices temporales propios de los acontecimientos históricos, por ejemplo, “Arte y cultura de España del siglo XIX” o “España en la Unión Europea”.
Asimismo, descubrirán cuáles son las fuentes de este conocimiento, las cuales se encuentran a continuación.
4. Utilización de Documentos: Orales, Escritos y Restos Materiales
Los alumnos han de valorar la importancia que tienen los restos para el conocimiento y estudio de la historia y como patrimonio natural, histórico, cultural y artístico y responsabilizarse de su cuidado y conservación para legar tales maravillas a las generaciones venideras (anexo I, d, Decreto 27/2014).
Las fuentes y documentos históricos son los testigos directos de los acontecimientos y nos ayudan a profundizar en el conocimiento histórico (Banet, 2014). Aunque no aparece en el epígrafe del tema, resultan muy útiles los visuales, como los vídeos de la Guerra Civil.
Primeramente, las fuentes orales reconstruyen nuestro pasado a través de testimonios, refranes, canciones y leyendas. El enfoque más acertado es acercar al alumnado a la historia de su contexto más cercano; así, invitaremos a sus abuelos al aula y reconocerán que todos, no solo los reyes o guerreros, son los protagonistas de la historia.
Seguidamente, los textos escritos son la fuente documental más importante sobre la que se construye la historia y se conservan principalmente en los archivos, así que es buena idea visitar los manuscritos medievales de Santoña.
Por último, los restos materiales añaden información a los escritos. En Cantabria tenemos los stencil estar históricos de las cuevas. Los alumnos podrían localizar un yacimiento en una caja de arena, acotar los restos con croquis y cintas, etiquetarlo y añadirlo e interpretarlo en el laboratorio.
5. Intervención Educativa
Plantear una propuesta de intervención educativa requiere pensar en un grupo de alumnado concreto, pues el nivel madurativo y curricular es un requisito para toda intervención exitosa. No obstante, procuraré establecer una serie de criterios generales relacionados con la concepción constructivista del aprendizaje, que deben presidir las potenciales propuestas para el área que nos ocupa.
Primeramente, para estos conocimientos concretos, me basaré, principalmente, en los contenidos del cuarto bloque de contenidos, llamado “Las huellas del tiempo”, de Ciencias Sociales y, en cierta medida, al primero, “Iniciación a la actividad científica”, de Ciencias de la Naturaleza, con el propósito de que el alumnado consiga alcanzar los objetivos de la etapa y las siete competencias clave.
Los desarrollaremos mediante las orientaciones metodológicas propuestas en el artículo nueve del Decreto 27/2014: atenderemos a la diversidad de nuestro alumnado basándonos en el Decreto 98/2005, de la atención a la diversidad en Cantabria, y fomentaremos agrupamientos heterogéneos para favorecer la tutoría entre iguales con el trabajo en equipo, el aprendizaje cooperativo y la evaluación formadora. A lo largo de las actividades, el alumnado aprende por descubrimiento, desarrolla las inteligencias múltiples, constata la funcionalidad de lo aprendido, aplicándolo en diferentes contextos reales o simulados, por ejemplo, a través de la resolución de problemas de la vida cotidiana. De esta forma, potenciamos su autonomía, los aprendizajes significativos, la competencia de aprender a aprender y la creatividad y el fomento de actividades abiertas que supongan un reto para los alumnos, aprovechando las diferentes fuentes de información, materiales procedentes del entorno más cercano y los vinculados a las TIC, de forma transversal.
Así, una propuesta de intervención educativa para esta área puede ser la realización de un portfolio temporal sobre las visitas al entorno cántabro, lugares que estimulan sensaciones como cápsulas del tiempo que les ayudarán a comprender las etapas históricas de la humanidad. Además, el contexto regional y local contribuye al entorno más próximo relevante para el alumno y, por tanto, el más susceptible de proporcionar un aprendizaje más significativo. Sin embargo, también hay que considerar el conocimiento global del contexto nacional, europeo, internacional y mundial.
Finalmente, no podemos olvidar la evaluación, autoevaluación, heteroevaluación y coevaluación formativa que persiguen la mejora de la enseñanza y el aprendizaje, planteando retos a los alumnos en función de sus intereses, necesidades, dificultades, capacidades y competencias y reorientando nuestras programaciones de acción docente, basándonos en la Orden del ECD/110/2014, para la evaluación y promoción de primaria en Cantabria.
6. Conclusiones
Los niños demandan el conocimiento de las ciencias sociales para encontrar una explicación a la enorme cantidad de fenómenos sociales que ocurren. Es posible enriquecer las ideas espontáneas de los niños, de tal modo que se logre una aproximación a la ciencia escolar, todavía muy alejada de la ciencia de los científicos. Se trata de lograr que los alumnos construyan sus esquemas de conocimiento que les permitan adquirir una visión amplia del mundo que los rodea.
Para ello, las actividades se basarán en la producción cooperativa de conocimiento, intercambio y confrontación de ideas en un clima de respeto por las producciones propias y ajenas, la exploración y experimentación, y ofrecerán diversidad de situaciones y contextos en los cuales se ponen en juego los contenidos del área de ciencias sociales.
7. Bibliografía y Webgrafía
- Banet, E. (2004). Estrategias para las ciencias de la educación primaria. Cursos de verano 2003 de la Universidad internacional Menéndez Pelayo (UIMP). MEC.
- Centros de profesorado en Cantabria: www.cepdecantabria
- Consejería de Educación, Cultura y Deporte, Gobierno de Cantabria: www.educantabria.es
- Consejo Escolar del Estado (2014). La participación de las familias en la educación escolar. Madrid: Ministerio Educación, Cultura y Deporte.
- González, M. Á. (2006). La acción tutorial: su concepción y su práctica. Ministerio de Educación.
- López, A. (2006). Trabajar con los compañeros para mejorar la educación. Aula de Innovación Educativa. Versión electrónica.
- Montessori, M. (2009). Ideas generales sobre el método Montessori manual práctico (p. 37). CEPE. 43 edición.
- Pujolás, P. (2004). Aprender juntos alumnos diferentes. Los equipos de aprendizaje cooperativo en el aula. Barcelona. Editorial Octaedro, S. L.
8. Normativa y Legislación
- Instrucciones de inicio de curso 208/2019 del Gobierno de Cantabria.
- Orden ECD/65/2015, de 21 de enero, por la que se describen las relaciones entre las competencias, los contenidos y los criterios de evaluación de la educación primaria, la educación secundaria obligatoria y el bachillerato.
- Decreto 27/2014, de 5 de junio, que establece el currículo de Primaria en Cantabria.
- Real Decreto 126/2014, de 28 de febrero, por el que se establece el currículo básico de Primaria.
- Ley Orgánica de 8/2013 de 9 de diciembre, para la Mejora de la Calidad Educativa.
- Ley 6/2008, de 26 de diciembre, de Educación de Cantabria.
- Ley Orgánica de 2/2006, de 3 de mayo, de Educación.
- Constitución Española, de 27 de diciembre de 1978.