Calidad del Aire: Vigilancia y Redes
Valores de Inmisión
Los niveles de inmisión establecidos por la legislación deben garantizar la calidad del aire, aunque siempre habrá cierto grado de contaminación. Los valores de inmisión miden los contaminantes en la atmósfera y se expresan en mg/m3, µg/m3 o unidades de volumen/volumen (ppm o ppb).
La vigilancia de los valores de inmisión es crucial en zonas urbanas, especialmente cerca de polígonos industriales. Los grandes emisores deben establecer sus propias redes de vigilancia y proporcionar los datos a las autoridades competentes.
Redes de Vigilancia
Existen diversas redes de vigilancia para conocer los niveles de contaminación a los que están expuestos los ciudadanos, la naturaleza y el patrimonio histórico-artístico.
Las medidas se realizan en interiores, cerca de recintos o en puntos geográficos determinados mediante estudios rigurosos. Para establecer el número y la ubicación de los puntos de muestreo, se consideran factores como:
- Focos emisores
- Características topográficas y urbanísticas
- Características meteorológicas
- Datos demográficos
- Zonas sensibles
- Demanda social
Tipos de Valores
Actualmente, existen tres tipos de valores:
- Valores límite: Deben respetarse en todo el territorio. Si se superan, se investigan las causas y se establecen medidas para evitar su repetición.
- Valores guía: Son objetivos a largo plazo que indican aire limpio. Se considera la posibilidad de limitar el desarrollo de una zona en función de su calidad del aire.
- Valores de alerta: Establecen concentraciones de contaminantes que requieren medidas inmediatas para abordar el problema.
En muchas directivas, los valores límite y guía se fijan en términos de mediana y percentil 98.
Percentil 98: El valor del percentil 98 asegura que el 98% de los valores están por debajo de él.
Mediana: Valor central de una serie de medidas (si el número es impar) o media aritmética de los centrales (si el número es par).
Factores Meteorológicos en la Contaminación Atmosférica
Transporte Convectivo
El viento transporta los contaminantes, produciendo dispersión horizontal y determinando las zonas expuestas a ellos. Una mayor velocidad del viento reduce la concentración de contaminantes a nivel del suelo debido a la dilución y mezcla.
Las circulaciones cerradas de vientos, como las brisas marinas o los vientos valle-montaña, pueden acumular contaminantes en ciertas zonas.
Transporte Convectivo Vertical
La variación vertical de temperatura determina la difusión vertical de contaminantes. Se distinguen tres clases de estabilidad atmosférica:
- Estable: La temperatura disminuye menos de 1 °C cada 100 m de altura, limitando la dispersión vertical.
- Inestable: La temperatura disminuye más de 1 °C cada 100 m de altura, favoreciendo la dispersión vertical.
- Indiferente: La variación de temperatura coincide con el gradiente vertical adiabático, sin limitar la dispersión vertical.
La inversión térmica, donde la temperatura aumenta con la altura, limita la dispersión de contaminantes.
Micrometeorología Urbana
Las grandes ciudades crean un microclima propio, el efecto isla urbana de calor, que afecta a la difusión de contaminantes.
El aire caliente se eleva, creando una corriente compensada de aire frío que penetra en la zona urbana. Esto da lugar a temperaturas más altas, menos viento y más precipitaciones en las ciudades.