El Sueño Infantil: Etapas, Evolución y Consejos para un Descanso Reparador

El Sueño Infantil

El sueño es un estado fisiológico activo y rítmico que aparece cada 24 horas y que se alterna con un estado de vigilia. Es activo, porque pese al descenso de la temperatura corporal, de la presión sanguínea y el ritmo cardíaco, el cerebro sigue trabajando. El sueño interviene en el proceso de restauración corporal, en la maduración cerebral, influye en el sistema inmunológico, favorece la memoria y el aprendizaje y aumenta la producción de hormona del crecimiento.

Fases del Sueño

Fase NO REM

  • Fase I: Se caracteriza por el adormecimiento, la relajación, la percepción de algunos estímulos exteriores, menor tono muscular y dura unos minutos.
  • Fase II: Es un sueño ligero. Implica menor ritmo cardiaco y respiratorio. Menor tono muscular que en la fase anterior. Desaparece la percepción de estímulos del exterior.
  • Fase III: Es la transición al sueño profundo. Disminuye aún más el ritmo respiratorio, cardiaco y el tono muscular. Es fundamental para conseguir un descanso óptimo. Si alguien se despierta en esta fase, está confuso y desorientado.
  • Fase IV: Sueño profundo. Relajación muscular total. Fundamental para el descanso y el restablecimiento físico y psíquico del organismo.

Fase REM

Caracterizada por el movimiento rápido de los ojos. En esta fase se producen la mayoría de los sueños. La actividad eléctrica del cerebro es parecida a la de la vigilia. El ritmo cardiaco y respiratorio es irregular. Se mantiene la atonía muscular. Si alguien se despierta en esta fase se encuentra descansado y alerta.

Características del Sueño

El sueño está compuesto de 4 ó 5 ciclos de 90 a 120 minutos cada uno. Los ciclos van variando, disminuye el sueño profundo y aumenta el sueño ligero y REM. La primera fase REM dura unos 5 minutos, la última unos 30 minutos. El porcentaje de sueño REM es mayor en niños que en adultos. La fase REM es fundamental para el desarrollo cognitivo y la fijación de aprendizajes.

Evolución del Sueño

0-3 meses. Casi todo el día durmiendo

  • Comen y duermen; adaptación a la vida fuera del útero.
  • Duermen de 16-18 horas (los niños inmaduros más).
  • Periodos de sueño cortos porque enseguida sienten hambre.
  • Hacia la 6ª semana, ratos diurnos de vigilia sobre todo por la tarde.
  • Periodos de sueño de 3-4 horas.
  • El 50% del sueño es REM, porque necesitan madurar. Los bebés son capaces de iniciar el sueño en fase REM.

3-6 meses. Distinguen día y noche

  • Duermen 15 horas.
  • El sueño empieza a inclinarse hacia la noche.
  • 4º mes: duermen 5 horas por el día y 10 horas por la noche con dos despertares.
  • Momento de establecer la rutina de acostarse, precedida por una actividad relajante.

6-9 meses. Empieza la educación

  • Duermen 14 horas.
  • Deja de existir una asociación fuerte entre alimentación y sueño.
  • A los 6 meses se puede enseñar al bebé a dormir.
  • El sueño cambia, ya no tiene solamente dos fases (REM y No REM), sino que empieza a parecerse al sueño de los adultos.
  • Frecuentes despertares nocturnos, pero el niño es capaz de dormirse solo. Es importante que no asocie el despertar con la presencia inmediata de los padres, de lo contrario le será muy difícil aprender a dormirse solo.

De 9 meses a 1 año. Un sueño reparador

  • La actividad física del niño hace que se canse y se refleja en el dormir.
  • A los 10-12 meses, duermen entre 11-12 horas con dos siestas de 1 hora.
  • No es raro que se despierten por la noche y lloren. Se debe acudir a calmarlos con tranquilidad y sin encender las luces.

De 1 a 3 años; dos siestas

  • Duermen de 10-13 horas con dos siestas.
  • Transición a la siesta única.
  • El niño debe acostarse sobre las 8 o las 9.
  • Momento clave para consolidar el hábito de dormir: elegir muñeco, pijama y cuento, le hace sentir cierto dominio.
  • Aparecen las pesadillas y los terrores nocturnos.
  • Creencias erróneas:
    • Si no duerme siesta dormirá mejor por la noche: cuando esto ocurre, por la tarde está cansado y de mal humor.
    • Si se acuesta más tarde dormirá mejor: a un niño muy cansado le costará conciliar el sueño, estará sobreexcitado.

¿Cómo se Instaura el Hábito del Sueño?

Hasta los 3 meses el niño protesta por hambre, cambio de pañal, enfermedad o malestar (es la etapa de los cólicos), siente frío o calor o pide contacto o cariño. El sueño y la alimentación están íntimamente relacionados. No existe ningún patrón, se duerme en cualquier sitio y a cualquier hora. Las pautas que debemos seguir serían:

Por la Noche

  • Bañarlo antes de acostarse.
  • Dejarlo en la cuna sin luz y con menos ruidos que por el día.
  • Atenderlo cuando empiece a gemir. Cuando se altera excesivamente le costará coger el pecho y dormir.
  • Darle de comer sin juegos ni charlas.
  • Usar luz de baja intensidad.
  • No dormirlo en brazos e intentar no mecerlo.
  • Si el bebé se duerme mientras come, echarlo en la cuna, y si gimotea, acariciarle la espalda o la tripa pero en la cuna.

Durante el Día

  • Tiene que aprender a conciliar el sueño con la actividad normal de la casa.
  • Cuando toque dormir (una vez que coma y expulse los gases), hay que dejarlo en la cuna para que se duerma solo.
  • Utilizar juguetes móviles de colores para que se relaje.
  • Cuando se despierte cogerle, hacerle carantoñas, jugar con él para que perciba que es de día.
  • La cuna, tanto de día como de noche, en su sitio habitual.

De los 3 a los 7 meses hay que instaurar hábitos a base de repetir rutinas a las que el niño asocie objetos, lugares y momentos. El niño debe empezar a dormir en su habitación. Las rutinas serían: baño, cena en la cocina o en el comedor, rato tranquilo que no hay que alargar mucho, las 20:30 es una buena hora a estas edades, decirle una frase del tipo “Es la hora de dormir, buenas noches”, darle su chupete y su juguete.

A partir de los 9 meses puede permanecer más tiempo despierto, por lo que suele poner oposición para acostarse. Al año y medio dormirá una siesta después de comer de 1 a 3 horas, las comidas se reparten en 4 y es capaz de dormir toda la noche seguida. A partir de los 2 años pasará de la cuna a la cama con barreras laterales.