Interaccionismo, Conductismo, Funcionalismo y Emergentismo en Psicología

Interaccionismo de Popper

Karl Popper puso de relieve la importancia de la relación entre el cerebro y la mente con su teoría de los “tres mundos”:

  • Mundo 1: La realidad física y biológica natural.
  • Mundo 2: La realidad mental.
  • Mundo 3: Las creaciones humanas, tanto materiales como inmateriales.

En el ser humano se distinguen:

  • La realidad corporal (Mundo 1).
  • Las realidades mentales (Mundo 2).
  • Las realidades producidas por la mente (Mundo 3).

El cerebro es material, la mente es inmaterial y está constituida por las experiencias subjetivas de la conciencia. Los productos elaborados por la actividad de la mente son tanto materiales como inmateriales. Admitir la existencia de la sensibilidad y la conciencia exige admitir que existe una realidad inmaterial: la mente. De tal forma que mente y cerebro son dos realidades independientes, a pesar de que la mente sea un producto que emergió por la evolución del cerebro.

Esta concepción de Popper se conoce como dualismo interaccionista. Según esta teoría, el cerebro y la mente interactúan en las realidades producidas por la mente y las realidades del mundo material. Los estados mentales interactúan con el cerebro.

Teoría de los tres mundos

Mundo 1

Es el mundo de los objetos físicos.

Mundo 2

Es el mundo de las experiencias subjetivas; está formado por los estados mentales y de conciencia.

Mundo 3

Es el mundo de los productos creativos y culturales humanos; está formado por los “contenidos objetivos del pensamiento”.

Conductismo de Skinner

El conductismo es una corriente de la psicología que impulsó Watson al defender que la ciencia psicológica debería ocuparse del estudio de la conducta humana. El conductismo considera que el ser humano se reduce a su conducta y esta se puede explicar analizando la cadena estímulo-respuesta.

Skinner afirma que toda la conducta es el resultado de la interacción entre estímulo y respuesta: todos los organismos comparten el mismo sistema de aprendizaje. Así, entre la conducta animal y la humana, solo se observa una diferencia de grado en la complejidad del mismo mecanismo de aprendizaje.

Sus defensores sostienen que la denominada mente no es otra cosa que la disposición del individuo a responder de una manera determinada a un estímulo concreto. No existe nada que regule la conducta del hombre, son pautas de comportamiento que responden a las leyes que la naturaleza ha dejado impresas en forma de “estímulo-respuesta”.

El objetivo de la ciencia psicológica es descubrir las leyes que rigen el mecanismo “estímulo-respuesta”. Conociendo estas leyes se puede predecir cualquier respuesta a partir de un determinado estímulo o establecer un estímulo, o bien, establecer la naturaleza de un estímulo a partir de una respuesta dada. Con ello, el conductismo niega al hombre su autonomía. Esta tesis se conoce como determinismo ambiental.

Funcionalismo

El funcionalismo afirma que la naturaleza de la mente se define por las funciones que ejerce en relación a las necesidades del organismo. Los procesos mentales son funciones cerebrales que tienen un soporte neurofísico, pero no variarían aunque su soporte material fuera distinto.

El funcionalismo se opone al fisicalismo, que establece la distinción entre cerebro y mente, pero defiende que un estado mental no requiere de la presencia de un cerebro, ya que los estados mentales son independientes de los materiales; lo importante es el programa lógico, el funcionamiento y el acoplamiento de las partes. De ello se deduce que las funciones del cerebro pueden ser realizadas también por máquinas.

Emergentismo

Se considera la hipótesis científica más acorde con los acontecimientos ocurridos en la evolución del universo. “Emergentismo” indica la aparición de una novedad cualitativa que se produce a partir de elementos ya existentes.

La afirmación de que la mente emerge por la evolución del cerebro solo es la constatación de un hecho, pero no una explicación de cómo llega a producirse tal hecho. Por esta razón, del emergentismo se desprenden visiones antropológicas.

Monismo materialista

Defendida por Mario Bunge. Afirma que en el universo solo existe la materia, y que esta única sustancia origina diferentes sistemas con propiedades distintas. Lo mental emerge del sistema cerebral y sus cualidades específicas se deben a su enorme complejidad evolutiva.

Bunge afirma que el cerebro es un sistema con dos tipos de propiedades: unas son propias de las partes que lo componen y otras, del sistema, del conjunto cerebral, la plasticidad. Esta es la propiedad del sistema, que tiene la propiedad de autopropagación y autoorganización.

Naturalismo biológico

Intenta explicar la naturaleza humana desde un punto de vista distinto de las posiciones dualistas y monistas. Searle considera que ambos enfoques son falsos, que derivan de la manera en que Descartes enfrentó las dos sustancias finitas, el alma y el cuerpo:

  • El dualismo es erróneo por considerar que alma y cuerpo son independientes y valora la sustancia inmaterial por encima de la sustancia material.
  • El monismo es erróneo por negar la existencia de los estados mentales e incluso de la propia mente.