Introducción
Para comprender la arquitectura del siglo XIX, debemos considerar algunos parámetros culturales. El movimiento romántico, con su gusto por lo pintoresco, exótico y legendario, incitó a imitar la arquitectura de períodos históricos pasados. El progreso técnico, económico y social trajo nuevos problemas arquitectónicos, como las estaciones de ferrocarril, bancos y salas de exposición. Esto obligó a los arquitectos a reflexionar sobre las funciones y utilidades de un edificio. Sigue leyendo