Tras la guerra, Alemania quedó dividida en cuatro zonas, cada una administrada por un país aliado: Estados Unidos, Reino Unido, Francia y la URSS. Berlín se encontraba en la zona soviética y, a su vez, había sido dividida en cuatro zonas administradas por los mismos países. En 1948 se celebró la Conferencia de Londres, en la que las tres potencias occidentales acordaron la unificación de sus zonas en un solo Estado. La respuesta de Stalin fue el bloqueo terrestre de Berlín. Berlín quedó Sigue leyendo