Ser Perfectísimo e Inteligencia Ordenadora
En la cuarta vía, Santo Tomás concluye afirmando la existencia de Dios como ser perfectísimo, el cual es “muy veraz, muy bueno, muy noble”. Este máximo ser es causa de las perfecciones limitadas que se dan en las cosas. Estas perfecciones, que serían comunes a Dios y a las criaturas, son las propiedades trascendentales. No son restringidas, sino perfecciones absolutas. El texto menciona tres de estas perfecciones: la bondad, la verdad y la nobleza. Sigue leyendo